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En solo una manzana, cerca de 20 personas fallecieron con COVID-19.

Durante los días críticos de la pandemia en Guayaquil, el coronavirus dejó dolor y desolación en un barrio del Suburbio. Tanto así, que los habitantes llevan la cuenta de cuántos vecinos perdieron la vida a causa del COVID-19. En solo una manzana, cerca de 20 personas fallecieron con síntomas relacionados a esta enfermedad.

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Por ejemplo, el propietario de un taller de costura murió a causa de coronavirus y el último recuerdo que tienen de don William es un terno negro que no llegó a terminar de coser y que ahora está colgado en el taller que por cerca de 45 años atendió a los vecinos de la 41 y Chambers, pero hoy las máquinas están apagadas porque el coronavirus se llevó al único sastre de esa zona.

Geoconda Lindao, cuenta que su papá falleció rápido y todo fue por falta de respiración. Ella también comenta que perdió un amigo y dos asistentes que ayudaban en el taller.

Al recorrer las calles de esta zona, se repiten las historias como esta. Se encuentra Elsa Tomalá, quien perdió a su hermano el 3 de abril, y por poco a su esposo. Recuerda que su hermano la llamó y le dijo que tenía fiebre, él murió en solo tres días.

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En esta zona del Suburbio de Guayaquil, son los vecinos, quienes llevan la cuenta de sus fallecidos, y aseguran que solo en una manzana cerca de 20 personas murieron por síntomas relacionados al coronavirus. El sacristán de la iglesia, Ovidio Piyasagua, sobrevivió al COVID-19 a sus 69 años y con una diabetes encima.

A pesar del dolor que embarga a los moradores de esta zona de Guyaquil, ellos no pierden la fe y están a la espera de que su iglesia abra para ir a hacer una oración por los que ahora ya no están.