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Vista panorámica de la población de Zarra. /JUANJO MONZÓ

Zarra, el pueblo inmune al coronavirus en la Comunitat

La localidad del Valle de Ayora está rodeada de poblaciones muy castigadas por el Covid-19 pero no ha registrado ningún positivo durante la pandemia

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Zarra es un pueblo inmune al coronavirus en esta pandemia. El Valle de Ayora ha sido una de las comarcas más castigadas por el Covid-19, tanto en casos positivos como en mortalidad, pero Zarra, enclavado justo en el centro de esa zona cero ha podido combatir al virus con un comportamiento ejemplar de sus ciudadanos y la ayuda de un Ayuntamiento que se ha volcado para evitar los contagios a toda costa. Es una especie de Galia en medio de una pandemia.

«No ha habido otra fórmula que seguir a rajatabla las directrices y los protocolos marcados por las autoridades políticas y sanitarias. El comportamiento de todos nuestros vecinos ha sido ejemplar y han llevado a cabo un confinamiento estricto«, señala el alcalde de Zarra, Ángel Pérez Boluda.

La localidad tiene 359 habitantes y cero casos por coronavirus. Zarra está rodeada por Ayora, Jarafuel y Teresa de Cofrentes, tres de los pueblos más castigados por el Covid-19 y con unas de las tasas de letalidad más altas. Ayora, con una población de 5.312 habitantes, ha tenido 59 contagios, una tasa de uno cada 111 habitantes, y cuenta con nueve fallecidos. Teresa de Cofrentes, con 636 habitantes ha reportado cinco casos -uno cada 78- y un fallecido. Y Jarafuel, con 754 vecinos, ha tenido nueve positivos y cuatro muertos, casi uno de cada dos. A este listado, a pesar de que no linda con Zarra, hay que sumar a Jalance con 26 casos y ocho muertos. Un poco más lejos, aunque dentro del área de influencia, hay municipios más grandes como Requena y Utiel que han tenido muchos positivos por Covid-19.

«Tuvimos muy claro desde el principio cómo teníamos que actuar. Hay mucha gente mayor y población de riesgo. Por eso, pedimos que la gente no saliera de casa y el Ayuntamiento se encargó de repartir a domicilio comida y medicamentos. La clave era tener a la población confinada», cuenta el alcalde, que apunta que se ha logrado mantener el blindaje frente al coronavirus pese a que poblaciones como Ayora o Teresa de Cofrentes están a menos de cinco kilómetros de distancia.

En Zarra hay un consultorio médico y todas las consultas se hacen vía telefónica. «Insisto, el mérito es de nuestros vecinos», apunta Ángel Pérez.

Ahora, con la desescalada, hay miedo. «Es normal. Los vecinos, que han seguido el protocolo marcado, tienen miedo de la gente que llega a Zarra a pasar las vacaciones. Esperamos poder seguir igual, que todos cumplan las normas y que se pueda mantener controlada la situación», termina el alcalde de este municipio del Valle de Ayora que ha sobrevivido rodeado de contagios de Covid-19 y que no ha contabilizado ninguno.