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Crédito: Archivo El Litoral
Juicio abreviado

Condena en suspenso para una  mujer que apuñaló a su pareja

El hecho ocurrió el 1° de marzo en la vivienda que compartían junto a su hija de un año y medio, en La Guardia. Fue imputada por “tentativa de homicidio” pero luego la fiscalía determinó que “no se ha podido comprobar la intencionalidad” y cambió la calificación a “lesiones graves”.

“Perdoname, le pegué una puñalada” fue lo que Gimena S. alcanzó a decirle a su cuñada mientras salía de la casa de su pareja, con su hijita en brazos. Este jueves el juez Sergio Carraro admitió un acuerdo de juicio abreviado en el que la mujer “reconoce y acepta su responsabilidad” en el hecho acontecido el 1 de marzo de este año, por el que recibirá una condena de 3 años de prisión en suspenso.

Primeramente se la imputó por la “tentativa de homicidio” del padre de su hija, pero en el transcurso de la investigación “no se ha podido comprobar la intencionalidad homicida de la imputada” según lo explicado por el fiscal al frente del caso, Andrés Marchi. Por esto la calificación fue cambiada a “lesiones graves dolosas”, ya que la puñalada fue directamente al pecho, provocando a su pareja un taponamiento cardiaco que requirió cirugía.

La mujer había pedido una medida de restricción de acercamiento luego de recibir agresiones por parte de él, pero luego de que ésta venció retomaron la relación. Ese domingo 1º de marzo la familia paterna de su hija, que tiene apenas un año y medio, estaba afuera de la casa -ubicada en la bajada Distefano de La Guardia- cuando una discusión terminó de la peor manera. Fueron sus suegros y su cuñada los primeros en enterarse de lo ocurrido luego de que la vieran salir del lugar con manchas de sangre y la niña en brazos. La madre de la víctima dijo haber estado sentada en la vereda tomando mates cuando de pronto Sosa emergió del domicilio y la llamó, estaba llorando y al preguntarle qué pasaba la chica sólo alcanzó a decirle que había matado a “Chami”, que lo había apuñalado.

En medio de su congoja, la agresora también habló con su cuñada “perdoname, le pegué una puñalada”, ante lo que ésta ingresó corriendo y se encontró con su hermano tendido en el suelo boca arriba, con sangre en el pecho.

Intermediario

Llamaron a la policía y cuando los agentes arribaron fue el padre de la víctima quien los recibió e indicó dónde se encontraba su hijo. Cuando lo encontraron, el muchacho estaba desvaneciéndose y su pareja aún se encontraba allí, esperando a los uniformados. Él fue trasladado con urgencia, donde confirmaron que su vida corría peligro y debieron someterlo a una cirugía, tras la que se recuperó favorablemente.

Gimena S. fue detenida y al cabo de unos pocos días el juez Gustavo Urdiales le dictó la prisión preventiva. Consiguió su libertad recién este jueves, tras celebrarse al audiencia en la que el juez Sergio Carraro aceptó el acuerdo de juicio abreviado al que arribaron el fiscal y la Dra. Andrea Alberto, representante del Servicio Público Provincial de la Defensa Penal (SPPDP).

La imputada “acepta su responsabilidad” y acuerda someterse a determinadas reglas de conducta durante el período que dure la condena, que no es de cumplimiento efectivo. Deberá fijar residencia, someterse al cuidado del Patronato de Liberados, abstenerse de usar estupefacientes o abusar de bebidas alcohólicas; mantener una medida de distancia de 200 metros para con la víctima y su domicilio, y la prohibición de contacto con el mismo. Debido a que ambos son padres de una menor de edad, se dispuso que podrán contactarse a través de un intermediario por cuestiones vinculadas a la niña.

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