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Algunos expendios de cerveza en Mérida ya se surten de producto ante el próximo fin de la "ley seca" (Foto de Ramón Celis)

Los comercios se preparan para el fin de la "ley seca"

MÉRIDA.- Expendedores de bebidas alcohólicas ya se preparan para el levantamiento de la "ley seca" previsto para el próximo lunes, pese a que el gobierno del Estado aún no hace oficial que concluirá esa medida aplicada por la pandemia de coronavirus.

El jueves 14 pasado el gobierno estatal informó que la "ley seca" vigente desde el jueves 10 de abril continuaría 16 días más, de modo que a partir del 1 de junio se reanudará la venta de bebidas alcohólicas, pero bajo un esquema de modalidades que se daría a conocer posteriormente.

El viernes pasado, en entrevista telefónica en un canal nacional de televisión, el gobernador Mauricio Vila dijo que la comercialización de bebidas alcohólicas se reanudaría bajo el esquema de venta a domicilio.

El objetivo, explicó, es evitar las aglomeraciones que se dieron en otros lugares al levantar la "ley seca".

Aún sin anuncio oficial

Sin embargo, hasta hoy no se hace el anuncio oficial y tampoco se confirma si el martes pasado se reunió el Consejo de Salud para analizar el tema, como había anticipado al Diario el secretario de Salud, Mauricio Sauri Vivas.

No obstante, comerciantes y consumidores ya están más que listos, los primeros adquiriendo producto y lanzando promociones en redes sociales y los segundos buscando las mejores opciones de compra.

En algunas agencias se vio en los últimos días a camiones surtiendo cervezas, otros ya colocaron mantas anunciando la venta a domicilio y algunos supermercados están surtiendo sus áreas de vinos y licores.

Algunos establecimientos condicionan la venta a pago en efectivo e incluso con un cargo en el servicio a domicilio “según ubicación” del comprador.

Perjuicios por la venta clandestina

Sin embargo, durante la "ley seca" los vendedores clandestinos hicieron su agosto al vender los productos hasta el triple de su precio normal.

Por ejemplo, un “misil” de cerveza que costaba unos 30 pesos se vendió clandestinamente hasta en 100 pesos o más.

Incluso muchos compraron alcohol adulterado y al consumirlo al menos 18 lo pagaron con su vida, cuatro quedaron ciegos y un número indeterminado resultó con afectaciones y secuelas diversas.