https://imagenes.elpais.com/resizer/iW3emO3kDZf5t0HQzTE61o0nuJo=/768x0/cloudfront-eu-central-1.images.arcpublishing.com/prisa/OLVREGJYEFBBBAN6YMLZDBIM4Y.jpg
Manifestación a favor de la independenca de Euskadi celebrada en Bilbao.FERNANDO DOMINGO-ALDAMA

La causa independentista sigue perdiendo adeptos en Euskadi y se sitúa en el 14%

Casi el 40% de los vascos cree “bastante probable” que en 2030 una mujer sea lehendakari

by

La defensa de una Euskadi independiente sigue perdiendo peso en esta comunidad autónoma. En plena crisis sanitaria por la pandemia del coronavirus, los vascos no tienen entre sus principales preocupaciones la consecución de un Estado vasco separado del resto de España. Solo el 14% se declara partidario de constituir un país independiente, según el último Deustobarómetro Social, el estudio sociológico de la Universidad de Deusto difundido este viernes. La causa separatista cae dos puntos porcentuales con respecto a junio del año pasado y continúa siendo minoritaria entre los encuestados.

El modelo territorial preferido por los vascos es el de una autonomía con un mayor grado de autogobierno, pero sin romper con España. De entre las cinco formas de organización territorial dadas a elegir -ninguna autonomía, menos autonomía, misma autonomía, más autonomía e independencia-, esta última sale malparada, con un apoyo del 14% de los sondeados. Las opciones que más satisfacen son aumentar el grado de autogobierno (el 34,6%) y mantener la actual configuración autonómica (32,9%). El Deustobarómetro se elaboró entre el 5 y el 15 de mayo tras realizar 1.004 entrevistas en el País Vasco.

Además de reducirse la defensa de la independencia vasca, solo un 5,8% de los sondeados opina que será bastante o muy probable que Euskadi sea independiente en 2030, frente a un 41,8% que lo considera poco probable y otro 39,5% que lo ve casi imposible. Es más factible, según este estudio, que en esa fecha una mujer sea lehendakari. Así lo declaran el 39,3% de los vascos. En las próximas elecciones autonómicas, previstas el 12 de julio, tres de los cinco principales partidos -EH Bildu, PSE-EE y Podemos- concurrirán con una candidata a presidir la comunidad autónoma, mientras que los carteles del PNV y PP-Ciudadanos tendrán rostro masculino.

En lo que se refiere al sentimiento nacionalista, en una escala del 1 al 10, son mayoría (19,7%) quienes se sitúan a mitad de camino, lo que confirma que la sociedad vasca está dividida casi en proporciones similares entre los nacionalistas y los no nacionalistas.

Por otro lado, un 25,5% considera que la situación política del País Vasco es “buena” y otro 0,9% la califica de “muy buena”, además de un 51,1% que cree que es “regular”. Solo un 17,6% la cataloga de “muy mala”. Los encuestados valoran con una nota media de 5,6 la calidad de la democracia en el País Vasco, y suspenden con un 4,3 la del resto de España.

En otro apartado del estudio sociológico, un 70,8% de los entrevistados se muestra “muy de acuerdo” con que en ningún caso se puede justificar la violencia para alcanzar fines políticos, afirmación con la que también está “bastante de acuerdo” otro 14,6%. Dos años después de la disolución de ETA, apenas un 3,1% defendería el uso de la violencia.

El Deustobarómetro se centra en recabar la opinión de los vascos sobre los efectos de la pandemia de la covid-19. Esto ha hecho que la sanidad se haya convertido en la principal problema para Euskadi. Los efectos sanitarios del coronavirus se sitúa como la mayor preocupación para el 62,5% de los vascos, seguido de sus consecuencias económicas (38,9 %), el paro (37,5%) y la sanidad (18,7 %). Por detrás quedan las condiciones laborales (14,1 %). En este ranking, la relación de Euskadi con el Estado es un asunto que apenas preocupa a la sociedad vasca (ocupa el octavo puesto, por detrás de las pensiones), y menos aún el terrorismo, que ya se encuentra en el puesto 21.

Preguntados por la gestión que han hecho los Gobiernos vascos y central de la crisis sanitaria, suspenden ambos ejecutivos, aunque con una nota ligeramente mejor para el Ejecutivo que preside Urkullu. Sin embargo, el líder político mejor valorado durante este periodo de pandemia es Pedro Sánchez (obtiene una calificación de 4,2), solo una décima mejor valorado que Urkullu y seguido de Pablo Iglesias (4). Los peor valorados son los representantes de los partidos de derechas, esto es, el candidato a lehendakari del PP-Ciudadanos, Carlos Iturgaiz (1,2), Pablo Casado (0,8) y Santiago Abascal (0,2).

Sólo un 19 % de los vascos cree que se ha utilizado el estado de alarma para limitar el autogobierno y un 28 % opina que se ha aprovechado esta situación de excepcionalidad para limitar libertades y derechos fundamentales por parte del Gobierno central.