La Policía Nacional detiene a un hombre por corrupción de menores a una niña de 15 años
by REDACCIONAgentes de la Policía Nacional han detenido en Málaga a un hombre de 22 años y nacionalidad española como presunto responsable de un delito de corrupción de menores. Según las pesquisas, el arrestado habría conocido a la menor a través de las redes sociales y, tras ganarse su confianza, la convenció para que le compartiera un vídeo de contenido sexual.
La operación Rubioly realizada por el grupo de ciberdelincuencia de Málaga y Barcelona surge a raíz de una investigación iniciada en la Policía autonomica de Cataluña por un delito de corrupción de menores. Analizada la denuncia, los investigadores comprobaron que detrás del joven que se relacionaba con la joven menor objeto de la denuncia era un hombre de 22 años vecino de Málaga.
De las indagaciones se desprende que el arrestado conoció a la víctima a través de una red social y que tras ganarse su confianza comenzó a exigirle fotografías y vídeos de índole sexual a sabiendas de su minoría de edad. El investigado ofrecía a la menor ser su “Sugar Daddy” término que define una conducta consistente en crear una situación de superioridad por parte de un adulto (Daddy) hacia la menor (Sugar). Las pesquisas practicadas por los policías permitieron obtener indicios suficientes para acreditar los hechos e identificar a su autor. El hombre ha sido localizado y detenido en Málaga por su presunta responsabilidad en un delito corrupción de menores. En el operativo intervinieron el teléfono móvil del investigado para analizar su contenido. El arrestado y el atestado policial instruido han sido remitidos al Juzgado de Guardia de Detenidos de Málaga. Consejos para evitar ser víctima La Policía Nacional recuerda la importancia de educar a los niños y adolescentes en pautas seguras para navegar en la Red y evitar así ser víctimas de grooming y otros delitos. Entre esos consejos destaca el no proporcionar o compartir nunca imágenes privadas o comprometedoras a través de las redes sociales; desconfiar de desconocidos -en el mundo virtual no todo el mundo es quien dice ser-; mantener los equipos actualizados y protegidos para evitar el robo de archivos; no ceder nunca al chantaje del acosador y solicitar la ayuda de un adulto o de la Policía en caso de estar siendo víctima de acoso o intimidación en Internet.