El libro digital, un formato que gana espacio entre lectores en cuarentena
Editoriales proyectan duplicar ventas este año. Si hubiera un retail local, crecimiento sería mayor. Rosa María Cifuentes y Gastón Acurio son los autores con más descargas.
La imposibilidad de ir a una librería durante la cuarentena obligó a algunos lectores y editoriales a buscar alternativas. Es así que los e-books y audiolibros comenzaron a ganar seguidores en medio de la crisis. Aunque aún se dirigen a un segmento pequeño de usuarios, las casas editoriales más grandes proyectan un crecimiento para este año.
Para Grupo Planeta, la venta de formatos digitales en el Perú representó un 1% de sus ventas en el 2019, de acuerdo a Philippe Vergnaud, director general de la empresa. “Teníamos proyectado que este año sea el 2%, pero con la coyuntura actual creemos que será un 4%”, señala.
El mismo escenario pinta para Penguin Random House, quienes este año quieren por lo menos duplicar el 3% que significaron las ventas durante el 2019, según Joanna Carmen, jefa de Marketing de la compañía.
Durante el encierro
El estar encerrados motivó a los lectores a descubrir nuevas formas de encontrarse con su afición. Las cuatro plataformas más grandes para comprar libros electrónicos son Amazon, iBooks (Apple), Google Play Store, Kobo, entre otras.
“No hay ningún retail local que ofrezca venta de e-books. Por eso la gente aterriza en esos sitios”, afirma el ejecutivo de Planeta. De acuerdo a Vergnaud, si hubiera un actor nacional, las ventas de estos formatos se duplicarían. “El no tener a quien reclamarle por si algo no sale bien en la operación genera cierta barrera”, explica. Sin embargo, sostiene que tener una plataforma de estas es una inversión similar a poner una librería.
Incluso con las circunstancias actuales, los peruanos se volcaron a leer de esta forma durante el encierro. Penguin Random House comenzó una campaña en la que compartió sus contenidos de forma gratuita por una semana. En total, hubo más de 25,000 descargas, de acuerdo a la jefa de Marketing. El libro más solicitado fue “¡Bravazo!”, del chef Gastón Acurio, con más de 7,000 descargas. En el top 3 también estuvieron Renato Cisneros y Alonso Cueto.
De otro lado, Planeta tuvo un crecimiento del 47% si comparamos el primer trimestre del 2020 con el 2019. La autora Rosa María Cifuentes, por ejemplo, tiene tres títulos en el top 5 de ventas. Renato Cisneros y las memorias del expresidente Alan García completan el ranking.
Ventajas y estrategias
Para el lector peruano, se trata de formatos nuevos. Según ambos ejecutivos, el Perú es uno de los países de habla hispana que están a la cola en ventas. En México, estas representan un 8% del total, pero en España pueden llegar hasta el 20%. El audiolibro, que tiene un crecimiento mucho mayor que el libro electrónico, “está en fase experimental en nuestro país”, según la directiva de Penguin Random House.
Ambas marcas buscan darlos a conocer más mediante diversas campañas.
Vergnaud afirma que muchos lectores no saben que se puede leer desde cualquier dispositivo. “La pantalla de un celular en posición horizontal tiene el tamaño de una página de un libro de bolsillo”. Destaca la adaptabilidad del e-book y su precio. “Puede costar de 30 a 40 por ciento menos que un libro en físico”.
De otro lado, en Penguin han abierto su catálogo a precios con descuento para atraer lectores. Además, se preparan al menos ocho lanzamientos de obras solo en formato digital a partir de mayo. “Luego se evaluará si también se publican en impreso”, acota Carmen.
En cuanto al audiolibro, es un formato que es más costoso que el libro en físico por los costos de producción, pero que tiene éxito en ciudades grandes, donde el ruido del tráfico y el estrés de la vida diaria no permiten la calma para leer.
- El perfil del lector de libros electrónicos -
Tipos. Según ambos ejecutivos, los formatos digitales se dirigen a aproximadamente un 10% de la población. “Es un segmento que está bancarizado, que tiene Internet y que está acostumbrado a hacer compras por Internet”, afirma Joanna Carmen. “El comprador menor de 25 años, que uno piensa que podría ser el principal consumidor, sorprendentemente no lo es”, agrega el titular de Planeta.