Kilian Jornet revive su doble ascensión histórica al Everest: “Fue fascinante. ¿Volver? No me cierro a nada”
El 27 de mayo se cumplían tres años del doble ascenso al Everest en una semana de Kilian Jornet
by Celes PiedrabuenaKilian Jornet (32 años) está acostumbrado a explorar los límites del ser humano y en mayo de 2017, con sólo seis días de diferencia, lo volvió a demostrar al completar una doble ascensión al Everest, la cima del mundo (8.848 metros), sin la ayuda de oxígeno artificial ni de cuerdas fijas, en un reto “minimalista”, que generó una gran expectación y en el trascurso del cual llegó a sentir el rugido de la montaña en sus propias carnes.
La primera vez que coronó el Everest lo hizo en un tiempo de 26 horas partiendo desde el Campo Base, situado en el antiguo monasterio de R ombuk, a 5.100 metros. Hizo cumbre a medianoche del 21 al 22 de mayo, pero la ascensión no salió como estaba prevista. A partir de los 7.700 metros fue víctima de un virus estomacal que ralentizó su marcha, y por esta razón decidió que lo volvería a intentar para lograr un mejor registro .
Fue una experiencia fascinante, ver cómo mi cuerpo reaccionaba a la altura y cómo se adaptaba
No le bastaba con ser el primer alpinista que hollaba el Everest de una sola tirada y sin ayudas. Así fue como seis días después lo intentaba de nuevo. En esta ocasión partió del campo base avanzado, a 6.500 metros, en un día con mucho viento. Invirtió 17 horas, un tiempo que en su primera ascensión fue de 26 horas. Kilian, que viajó al Everest para mirar de lograr la ascensión más rápida al techo del mundo por la vertiente norte no logró su objetivo, al no poder superar el registro vertiginoso del austríaco Christian Stangl, que empleó 16 horas y 42 minutos desde el campo base avanzado en mayo de 2006.
Pero el atleta de la Cerdanya –8 veces campeón del mundo de esquí de montaña y en cuatro ocasiones campeón del mundo de Skyrunning– consiguió ser la persona capaz de ascender dos veces al Everest sin oxígeno en menos tiempo, superando la marca del sherpa Pemba Dorje, que lo hizo con siete días de diferencia en 2007.
¿Volver al Everest? No me cierro a nada. Hay tantas cosas que hacer en el Himalaya que espero poder volver pronto a explorar y ver nuevas posibilidades
Puede que no culminara la ascensión más rápida por la cara norte del Everest, pero demostró de nuevo su gran capacidad de adaptación a la altura y gran dosis de recuperación, abriendo un nuevo capítulo en su agenda. “Hacer dos veces cumbre en el Everest en una semana y sin oxígeno establece una nueva línea de posibilidades en alpinismo. Estoy muy contento”, dijo entonces.
Fascinación y suspicacia
La gesta de Jornet, como todas las gestas que van más allá de lo establecido, provocó a la vez fascinación y suspicacia, sobre todo por los clásicos del Himalaya y del Everest, como la de Reinhold Messner.
El alpinista italiano, la primera persona que escaló las 14 cumbres de más de 8.000 metros sin oxígeno y el primer hombre capaz de ascender al Everest en solitario en 1980, después de que en 1978, junto a Peter Habeler, se convirtieran en los primeros en ascender al Everest sin botellas de oxígeno, definió el logro de Kilian con estas palabras: “La carrera de Kilian Jornet en el Everest es un gran logro deportivo, que forma parte del ‘alpinismo de pista’ de hoy en día pero no es una aventura”.
Tras ambas ascensiones, Kilian –que ya intentó por primera vez el Everest en septiembre de 2016– cerraba el proyecto ‘Summits of my life’, que desde el 2012 le llevó a conquistar las cimas del Mont Blanc, Cervino, Denali y Aconcagua.
De momento no tengo nada previsto, ya que todas las carreras están paradas, tendremos que ver cómo va todo para ir avanzando
Tres años después de hacer historia, Kilian explica a MD desde su casa en Noruega que fue “una experiencia , ver cómo mi cuerpo reaccionaba a la altura y cómo se adaptaba. Fue un descubrimiento de mí mismo”. Asegura que si iniciara ahora el reto lo haría de la misma forma y que no le preocupa cómo haya quedado recogida su gesta en la historia del alpinismo. Jornet, que no tiene fotos del Everest en su casa a modo de decoración, avanza a MD que el único objetivo que tiene en mente ahora mismo es el de “seguir aprendiendo” y, para alegría de los amantes de la aventura, no da por cerrado el capítulo del Everest. “No me cierro a nada. Hay tantas cosas a hacer en el que espero volver temprano y ver nuevas posibilidades”.
Mientras, se puede seguir disfrutando de la película ‘Path to Everest’, en la que queda recogida su doble ascenso al techo del mundo.