Las diputaciones se ven reforzadas tras la crisis y piden "contar" en la planificación de fondos de la UE

Reivindican su papel de apoyo a ayuntamientos, asistencia social y dinamizador económico, y lamentan: "Conocemos bien el territorio"

El Covid-19 ha desperdigado sobre la mesa un buen número de debates que hasta hace apenas unos meses permanecían -en el mejor de los casos- en un segundo o tercer plano, como el teletrabajo, las luces y sombras del rural, la urgencia de reforzar la sanidad pública o el modelo turístico del país; pero también ha ayudado a cerrar, o al menos encarrilar, discusiones enrocadas desde hacía tiempo.

A juicio de las presidentas de las diputaciones de Pontevedra y Barcelona, Carmela Silva y Núria Marín i Martínez, uno de los debates sobre los que la crisis del coronavirus ha arrojado un inesperado chorro de luz es la utilidad de los propios organismos provinciales, cuestionados desde hace tiempo y que se han confirmado a raíz de Covid-19 -en opinión de ambas dirigentes, las dos socialistas- como un apoyo para los ayuntamientos, sus vecinos y empresas.

"La crisis ha puesto de manifiesto también cosas positivas. Ha servido para descubrir una institución como las diputaciones, que muchas veces los ciudadanos no perciben. Se ha puesto de manifiesto que somos una administración necesaria", reivindicó ayer Marín durante el foro Diálogos para la Reconstrucción, impulsado por FARO. De opinión similar, Silva insistió en el rol de los organismos provinciales para que los municipios, en especial los menos poblados, puedan desarrollar, por ejemplo, políticas de carácter medioambiental.

Inyección de liquidez y palanca de impulso municipal

Durante el diálogo, organizado de forma telemática y que se pudo seguir a través de la web de FARO DE VIGO, Silva y Marín subrayaron el papel de las diputaciones para desahogar la situación de los municipios durante la crisis. También su potencial para servir de palanca en la recuperación.

"Garantizamos liquidez adelantando ingresos sin cobrar, poniendo a disposición de los concellos recursos para atender a las personas más vulnerables, apoyando a las pymes, autónomos, al turismo... Y dibujando el escenario a corto y medio plazo", reflexionó Silva. Durante lo peor del estado de alarma, en pleno confinamiento, la Diputación pontevedresa anunció un fondo de liquidez de 21 millones de euros para municipios con las competencias de cobro de tasas e impuestos delegadas, agilizó el pago a proveedores e impulsó ayudas de emergencia, entre otras medidas de apoyo.

"Hemos estado ahí", incide Marín, quien ejerce además como alcaldesa de L´Hospitalet de Llobregat. Hace solo unos días el organismo que preside anunció su intención de movilizar mil millones de euros para la reactivación social y económica de la provincia de Barcelona . El 1 de junio prevé activar ya un plan de choque de 100 millones de euros y los restantes 900 se repartirán a lo largo de varios años.

Marín recordó también los servicios de teleasistencia o la ayuda prestada desde la diputación barcelonesa: "Creo que los ciudadanos han descubierto como una administración cercana; fuimos la primera barrera".

La dirigente catalana recordó que las diputaciones se encargan también de llevar a muchos municipios "servicios que de otra forma resultarían imposibles" y fijar población y empresas, combatiendo de esa forma la España vaciada o la brecha digital. "Resultamos esenciales para el reequilibrio".

"Contar" en el diseño de los fondos de la UE

Las líneas de acción política requieren sin embargo de respaldo económico, uno de los puntos en los que ayer pusieron el acento las diputaciones. En especial en los fondos procedentes de Bruselas. "Reclamamos que cuando se haga un plan de recursos con los fondos de la Unión Europea los ayuntamientos y diputaciones contemos, que podamos gestionar recursos, porque somos muy eficientes", resaltó Silva.

La también teniente de alcalde de Vigo insistió en el potencial de las diputaciones como elemento de organización basado en las divisiones por provincias. "Tenemos un gran conocimiento del territorio y nadie está tan preparado como el mundo local para preparar el cambio. Hemos sido elementos catalizadores, de apoyo al sector industrial y al primario, también las grandes responsables de que la Agenda 2030 esté en el debate", zanjó Silva. A pesar de ese papel, Núria Marín lamentó que "en el ámbito local nos hemos sentido aislados y solos".

Para apoyar a los Estados miembros, la UE plantea una inyección millonaria. A finales de marzo, por ejemplo, desbloqueó hasta 37.000 millones en fondos estructurales no gastados para contribuir a que los países mitiguen el impacto de la crisis.

A principios de mayo los presidentes de las diputaciones, reunidos de forma telemática en una comisión de la Federación Española de Municipios y Provincias (Femp), lanzaron también un mensaje que apela a la autonomía local y al uso sin condiciones del superávit para afrontar así la desescalada y el camino hacia la "nueva normalidad" impuesta por el Covid-19. "Necesitamos retornar ese superávit generado por nosotros en políticas fundamentales, la reactivación económica, cultural...", incidió ayer Marín. "Es imprescindible que el mundo local participe. Somos fundamentales. A nivel autonómico y estatal no se nos puede dar la espalda", abunda Silva.

La recuperación, o se afronta unidos o no será

La recuperación, o se afronta con unidad y un esfuerzo colectivo, o difícilmente será tal. Tanto Silva como Marín incidieron ayer en la importancia de sumar fuerzas para afrontar la "nueva normalidad" impuesta por el Covid-19 y sus retos. "No tiene sentido que en cada ciudad o pueblo hagamos cosas de forma desorganizada. Tenemos que aunar los recursos que vengan de la UE, del Gobierno español, de las comunidades autónomas y los que podamos aportar desde las diputaciones y los concellos", reflexionó Marín, quien recalcó la importancia de "trabajar juntos" en la recuperación. Un mensaje similar lanzó Silva en relación al turismo. La responsable de la Diputación de Pontevedra apuntó la importancia de trazar estrategias conjuntas con el norte de Portugal -dotado también de un gran poder de captación de visitantes- y territorios próximos y no caer en discursos que ensalcen las virtudes de un territorio a costa de cuestionar las de sus aledaños.

Un plan de recuperación libre de "tijeretazos"

Uno de los mensajes en los que ayer incidió la responsable de la Diputación de Barcelona y regidora de L´Hospitalet es aprender de las lecciones que dejó la recesión de 2008, como por ejemplo la cuestionable eficacia de una estrategia de recuperación basada en los recortes. "Es importante hablar de economía, pero también de personas. No caigamos en los mismos errores que con la anterior crisis", reflexionó Marín. "Las personas son lo primero", coincidió Silva. Durante el estado de alarma -abundó la responsable de la Diputación gallega- se ha visibilizado además que "el espacio público debe recuperarse para las personas".

En ambas ideas, la de los reparos ante los recortes y la apuesta por ciudades en las que ganan peso los peatones, ambas presidentas provinciales están en sintonía con el Gobierno local de Vigo. El alcalde, Abel Caballero, ya ha advertido contra el riesgo de asumir una política de tijeretazos similar a la adoptada hace una década. "Nadie se puede quedar sin apoyo. No queremos que se repita la crisis de 2008 y el enfoque terrible de recortes y generación de miseria", advertía el primer edil olívico hace un mes.

En la apuesta por "humanizar" los casos urbanos, Caballero avanzaba también a comienzos de mayo su deseo de "peatonalizar al máximo la ciudad para sacar el comercio a la calle". En la práctica, el Consistorio ha activado ya, por ejemplo, las obras para la reforma de Porta do Sol.

Apoyo al turismo y comercio

Otro de los mensajes que dejaron ayer Carmela Silva y Núria Marín durante los Diálogos para la Reconstrucción impulsados por FARO es la importancia de apoyar al tejido comercial y turístico, clave por su peso económico, tanto en Cataluña como en el sur de Galicia, y que da empleo a un buen número de familias de ambos territorios.

"El comercio, el turismo y la cultura son sectores que necesitamos ayudar en beneficio de todos", abogó la dirigente catalana. A modo de ejemplo y para ilustrar su potencial como motor generador de riqueza, Marín recordó el peso creciente que ha ido ganando el turismo en L´Hospitalet. La localidad catalana, con un padrón ligeramente inferior al de Vigo y ubicada a pocos kilómetros del centro de la Ciudad Condal, ha visto aumentar de forma notable la afluencia de viajeros a lo largo de los años, lo que ha aupado al turismo a una posición estratégica en su económica.

"Es un sector que nos afecta a todos. El cultural y deportivo fueron los que salieron más perjudicados de la anterior crisis", advirtió Marín. El mismo énfasis puso al apuntar la relevancia del comercio: "Nadie podía pensar que los mercados podían tener un papel tan importante en esta crisis". La primera edil de L´Hospitalet señaló así mismo que el Covid-19 ha permitido a los pequeños negocios mostrar su capacidad para "reinventarse", adaptarse a las circunstancias y dar el salto, por ejemplo, a la venta a través de canales online.

"Seguiremos con las restricciones al movimiento, con lo que todo lo que tenga que ver con las políticas de proximidad va a resultar fundamental", reflexionó la presidenta de la Diputación barcelonesa.

Sobre la mesa ayer se pusieron planteamientos como apostar por las campañas para apoyar al comercio -"clave para evitar la deslocalización", señalaron las dirigentes locales- o respaldar el turismo sostenible. En el caso de Pontevedra Silva recordó que además del modelo tradicional de "sol y playa", las Rías Baixas ofrecen también cultura y patrimonio.

Nota a las comunidades autónomas: suspenso

Suspenso. Sin paliativos. Es la nota que ayer pusieron tanto Silva como Marín cuando se les pidió que evaluasen la gestión de sus respectivos gobiernos autonómicos en la gestión de la crisis del Covid-19. "¿Y la política económica? ¿Y la industrial? ¿Qué va a hacer para promocionar la cultura y cuál es la nueva política sanitaria?", cuestionó la presidenta de Pontevedra: "No se les ve, no están ni se les espera". Desde Cataluña, Marín reconoció haber mantenido "muchas reuniones" con la Generalitat, pero lamentó que "ha servido de poco". "Nos han oído, pero escuchado poco", censuró la dirigente tras lamentar que parte del Ejecutivo autonómico está centrado en el proceso independentista.