la pandemia ||no tienen otras fuentes de ingreso
Puesteros piden volver a trabajar en La Gruta y en la plaza 25 de Agosto
En Choya son 28 familias y en la plaza, más de 30. Piden ayuda económica y poder abrir las ferias como otros comercios.
Mientras la mayoría de los sectores comerciales abrieron sus puertas ante las flexibilizaciones otorgadas por el Comité de Emergencia local, aún restan variados rubros a ser considerados. En la zona de La Gruta, unas 28 familias piden asistencia inmediata ya que están sumamente perjudicadas por el cierre de los puestos del lugar. También los más de 30 feriantes ubicados en la plaza 25 de Agosto solicitaron ayer públicamente un permiso para trabajar pues viven de esa actividad.
Laura Palomeque, vocera de los feriantes de La Gruta, contó que observan cómo habilitan los diversos rubros con protocolos pero a la vez conocen que la situación del grupo es particular ya que el lugar está cerrado.
“Antes de la pandemia no podíamos abrir porque nos dijeron que esperemos hasta que abran los nuevos locales; hace dos meses nos dieron un bolsón y nada más y llevamos mucho más de 70 días cerrados. Somos 28 puestos en La Gruta y mientras esté cerrado no podemos abrir; necesitamos o que se abra el lugar o bien que nos ayuden para poder esperar mientras todo esto pase.
Hemos presentado una nota de pedido de ayuda a la Municipalidad de la Capital, desde donde nos dijeron que tenemos que esperar unos días para una respuesta. Queremos decir que los puestos son nuestra fuente de trabajo, vivimos de esto y no tenemos a quiénes vender porque el rubro nuestro es particular”, explicó la vocera.
De igual modo, otros integrantes del grupo de vendedores ya vienen expresándose por las redes sociales, develando la situación que padecen, sobre todo porque la mayoría no tiene ingresos y vive con lo generado de sus ventas de objetos religiosos.
Por su parte, los puesteros de la plaza 25 de Agosto, que superan las 30 familias, explicaron a El Ancasti digital no comprender por qué los comercios de la peatonal abrieron y ellos como feriantes y al aire libre no lo pueden hacer.
“Vivimos de lo que vendemos y necesitamos volver a abrir”. Ésta fue una de las frases que los vendedores de los puestos ubicados en la plaza 25 de Agosto (Plaza de La Estación) utilizaron para describir el complicado momento que viven.
Sin poder abrir desde que se inició el aislamiento social, la situación de estos vendedores es desesperante y por eso ya realizaron el pedido formal a las autoridades, aunque, según le indicaron a elancasti.com.ar, aún no tuvieron respuesta.
“Si todos los demás comercios ya abrieron no entendemos por qué no podemos abrir nosotros. Tenemos que volver a trabajar para poder subsistir”, enfatizaron, y agregaron: "Nos tienen en el aire esperando una respuesta. Nosotros pagamos impuestos por esos puestos y entendemos que la situación es complicada, pero necesitamos una respuesta", expusieron.
Andalgalá
CORRESPONSALÍA - Ante la incertidumbre de cuándo volverán a abrir sus puertas de manera normal, los propietarios de bares se entrevistaron con el intendente Eduardo Córdoba para plantearle la situación por la cual atraviesan.
Miguel Ignes, empresario que posee un bar frente a la plaza 9 de Julio, mencionó que hace más de dos meses que se encuentran con las puertas cerradas. “Tenemos que pagar alquiler, luz, empleados; para nosotros es imposible seguir, por eso le vinimos a plantear que se flexibilice un poco para ver si podemos reabrir las puertas nuevamente”, afirmó. Sin embargo, en la reunión del COE llevada a cabo dias atrás, las autoridades sanitarias aconsejaron no reanudar la actividad. Ante este planteo, Córdoba se comprometió a rever la situación; para ello se hará una nueva inspección a los locales y se establecerán las medidas sanitarias que sean aconsejadas, en el mejor de los casos a partir de lunes 1° de junio volverán a atender normalmente.
A quienes desayunen no podrán permanecer más de 20 minutos en el local; quienes deseen almorzar o desayunar, el tiempo estipulado es de 45 minutos. Otro de los puntos que se planteó y quizás sea uno de los más álgidos a resolver es que el horario de atención al público sea de 7 a 20, ya que los comerciantes consideran que es un horario muy escaso para el rubro gastronómico.n