Sale el general Fernando Santafé

El número tres de la Guardia Civil deja el cargo y ahonda la crisis de la institución

Era el responsable de operaciones y el sustituto natural del DAO y no ocultaba su malestar por el cese del coronel Pérez de los Cobos.

La purga de altos cargos en la Guardia Civil por la ‘rebelión’ derivada del cese de Diego Pérez de los Cobos no ha terminado. Este mismo miércoles se ha conocido la salida del número tres del Cuerpo, el teniente general Fernando Santafé, que también había mostrado su malestar por la situación de la institución. Fuentes cercanas al organismo aseguran que estos cambios son el inicio de un proceso que el ministro de Interior esta dispuesto a poner en marcha a cualquier precio y en el que no se ocultan sus enfrentamientos con la cúpula en estos días. 

Mientras que desde el entorno del teniente general se sostiene que se trata de una salida que ya se estaba preparando hace tiempo y que estaba pactada meses atrás, otros entornos del Cuerpo consultados aseguran que Santafé había mostrado su malestar al ministro en una reunión que mantuvieron el pasado martes, marcada por el cese del coronel Pérez de los Cobos y la dimisión de Ceña.

Se da el caso de que Santafé era el sustituto natural de Laurentino Ceña, dado que es el teniente general con la suficiente antigüedad y más cercano en el escalafón. Hay que recordar que el ministro explicó este miércoles en el Congreso su preferencia por “reconstruir” un equipo mediante un “proceso natural de sustitución basado en la confianza”, de forma que ese tipo de cambios que siempre suelen ser cuasi automáticos en la Guardia Civil, ya no están garantizados.

En cualquier caso, la salida de otro teniente general en menos de tres días deja descabezada la cúpula de la Guardia Civil, toda vez que Fernando Santafé era el responsable del mando de operaciones, un alto cargo al que había accedido después de una larga labor en la lucha antiterrorista y de investigación criminal en España. Santafé estaba al frente de toda la actividad operativa de la Guardia Civil en España desde su nombramiento, en agosto del año pasado, y mantenía la responsabilidad en el área de información, investigación y ciberdelincuencia, lo que le convierte, hasta ahora, en uno de los pilares básicos del funcionamiento del Cuerpo.

Nuevos criterios sobre nombramientos

“Marlaska es carne de banquillo, de esta no puede salir indemne”, critican desde varios colectivos de guardias civiles, que recogen el malestar que se ha extendido por todo el Cuerpo por todas las salidas de los altos mandos. Una de las cuestiones que no se entiende cuando el ministro habla de “falta de confianza” para cesar al coronel de Madrid, es cómo se va a generar ahora esa confianza con una cúpula que esta enfrentada con la directora general, María Gámez, y con el propio ministro que la trajo desde Andalucía, donde había sido una defensora de la actuación de la Guardia Civil en el caso Julen desde supuesto de subdelegada del Gobierno en Málaga.

Tras la dimisión de Laurentino Ceña, quedaban tres tenientes generales en la cúpula, incluido Santafé, a los que Marlaska se ha saltado para nombrar DAO a un general al que hay que elevar de nivel antes de ser nombrado. Fuentes policiales aseguran que todo apunta a que esos tenientes generales no quisieron ocupar el cargo que dejaba Ceña por la situación en que se producía, tras el cese de Pérez de los Cobos. “Hay que entender que tienen ya poco que ganar en sus carreras al llegar a DAO con este Gobierno, y en el Cuerpo se va a reconocer siempre su entereza por no haberlo hecho en apoyo de sus compañeros”, señala un alto mando de la Benemérita.

Este mismo miércoles, desde la Unión de Oficiales de la Guardia Civil se ha enviado una carta al ministro del Interior en el que se le solicita una reunión extraordinaria del Consejo de la institución para que el ministro les explique ese "impulso" que quiere dar a la renovación de los altos cargos y "cuáles son los méritos, capacidades, valores y virtudes que deben ostentar los guardias civiles para poder acceder a determinados puestos de trabajo, o para no ser cesados". Más concretamente, se centran en los criterios para nombrar y cesar en puestos de trabajo de libre designación, como jefes de comandancias y unidades equivalentes, unidades de policía judicial y órganos de apoyo a la  cuyo principal fin es la investigación.

Hoy mismo se ha confirmado que la directora general llamó a Pérez de los Cobos para pedirle información que, supuestamente, manejaba sobre la investigación el 8-M, por ser algo comprometedor para el Ejecutivo. Si eso se llega a probar, la responsable de la Guardia Civil y el ministro estarían ante una complicada situación legal, si bien Marlaska ha asegurado esta mañana en el Congreso ante las insistentes preguntas de la oposición que nadie puede demostrarle que haya cometido algún tipo de injerencia en el Poder Judicial, que conoce bien tras treinta años de juez.