Producción porcina avileña y disponibilidad de alimentos

La disponibilidad de alimento, elemento condicionante para cumplir los planes de acopio de carne de cerdo, ocupa a productores privados y directivos empresariales de Ciego de Ávila, quienes buscan alternativas para sustituir importaciones de pienso.

Durante un recorrido por unidades empresariales de base, Carlos Luis Garrido Pérez, presidente del Consejo de Defensa provincial y dirigentes de la Empresa Porcina avileña, intercambiaron con criadores particulares las posibilidades reales de cumplir un plan ya ajustado, que queda en unas cuatro mil toneladas por debajo del concebido inicialmente para cubrir las necesidades elementales del territorio.

Yandira Sánchez Fuentes, directora de la Empresa Porcina, destacó que la falta de financiamiento y el bloqueo criminal de Estados Unidos a Cuba impide adquirir las cantidades necesarias de maíz y soya para cubrir la demanda de pienso, lo que imposibilita cumplir los convenios de entrega a los particulares y con ello el acopio de carne pactado.

Precisó que el 80 por ciento de la producción porcina del territorio recae en unos 174 productores con 260 convenios, quienes sostienen la alimentación de la masa a base de producciones nacionales.

Puso el ejemplo de la fábrica de pienso líquido ubicada en El Azufre, que tiene como materia prima fundamental los subproductos alimenticios del destino turístico Jardines del Rey, hoy paralizado a causa de la COVID-19, y de otras industrias avileñas.

Ante la difícil coyuntura económica, el presidente del Consejo de Defensa, Carlos Luis Garrido Pérez, resaltó la necesidad de cambiar la mentalidad importadora y fomentar alternativas como la siembra de yuca u otros cultivos que puedan combinarse en la alimentación.

Por los insuficientes volúmenes de carne que se generan hoy —dijo— se busca cuanto más puede hacerse para ganar en conversión y extender la elaboración de alimentos con embutidos, picadillos, u otras variantes.

No obstante, precisó, la provincia debe aplicar iniciativas que le permitan avanzar más en el incremento de su capacidad de producción para responder a necesidades del turismo, cuando reinicie las actividades, de la población y del consumo social.

Una de esas variantes es La Rodaja, un centro multiplicador de cerdos de capa oscura, con la misión de obtener cochinatas de raza criolla negra, las que se llevan hasta los 70 kilogramos, y posteriormente se venden a los productores particulares para el fomento de la especie, explicó Yalexey Rodríguez Cuba, jefe de producción de la entidad porcina.

A su vez Alfredo Purniel, de la finca El Porvenir, asociado a la Unidad Empresarial de Base Ricardo Rey, aseveró que mantiene unos mil animales de preceba, para cuya alimentación emplea suero y papilla, que obtiene mediante convenios con los combinados lácteo y citrícola, respectivamente.

Otros productores también expresaron su compromiso con el aporte de carne y la necesidad de contar con más áreas para el cultivo de viandas que puedan complementar la alimentación de los cerdos.