Pablo Iglesias acusa al PP de llamar a la insubordinación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado

El vicepresidente del Gobierno emplea su tono más duro contra García Egea: «Nos estamos jugando la democracia, señoría»

La misma semana que el juez ha concluido que el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, no fue víctima del excomisario José Manuel Villarejo, el secretario general de Podemos ha recuperado su tono más bronco en la sesión de control al Ejecutivo en el Congreso de los Diputados. Lejos queda la suavidad con la que ha contestado en las últimas semanas al número dos del PP, Teodoro García Egea, en sus últimos cara a cara. «Nos estamos jugando la democracia, señoría», le ha gritado al diputado popular, al final de su contrarréplica.

La pregunta de García Egea, sobre la gestión del vicepresidente Iglesias en la crisis del coronavirus, ha quedado silenciada por el enfrentamiento entre ambos, que desde sus escaños no han cesado en lanzarse dardos. Como no podía ser de otra manera, ha salido a colación la destitución del coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos por parte del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Aplaudía el diputado del PP la dimisión ejemplar de Laurentino Ceña y es entonces cuando ha explotado Iglesias: «¿Ha leído usted el papel que le han escrito? ¿Está llamando a la insubordinación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado? ¿No se les cae la cara de vergüenza de reírse en un día de luto oficial? ¿Usted es consciente de que está incitando a incumplir las órdenes a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado?».

Antes, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, había acusado al líder de la oposición, Pablo Casado, de «parecerse» demasiado a Vox por pensar como ese partido en muchos aspectos y votar junto a él en la prórroga del estado de alarma. Algo que ha recibido la pronta respuesta de García Egea: «Siguiendo el símil del señor Sánchez, si ustedes actúan como Bildu, pactan con Bildu y votan como Bildu, son Bildu».

Pero las acusaciones sobre el pacto soterrado de la semana pasada entre el PSOE, Unidas Podemos y EH Bildu para derogar de forma íntegra la reforma laboral -algo que rectificó horas después el Gobierno- no ha sido sino la punta del iceberg. Iglesias ha defendido la gestión del Ejecutivo de esta crisis, con los ERTE, el ingreso mínimo vital o la prohibición de desahucios, aunque sin duda ha sido la controvertida destitución de Pérez de los Cobos la que ha centrado el debate.

«Están preocupados por el 8-M»

«El cese de un coronel de la Guardia Civil que cumplía con su función demuestra que están preocupados con lo que pasó el 8-M», ha espetado García Egea en su primera intervención. «Desconfianza», le ha contestado Iglesias, «generan la corrupción y desmontar el Estado del bienestar».

El vicepresidente, como viene siendo habitual, ha tratado de incomodar al dirigente popular por la supuesta aproximación de su partido a la «extrema derecha». «Reflexione sobre las implicaciones que tiene haberse echado al monte con Vox. Subir es muy fácil; bajar, muy difícil. Se están poniendo en una posición muy complicada para la democracia española».

En la réplica, García Egea se ha preguntado con sorna qué tiene que pasar para que un ministro del Gobierno de Sánchez dimita y ha recordado a Iglesias que está «a punto de sentarse en el banquillo». «Propone derogar la reforma laboral del PP, que creó tres millones de empleos, y con usted se han perdido un millón de empleos, ¿a quién hay que derogar?», le ha cuestionado irónicamente, antes de recuperar el tema del día.

Se ha referido García Egea a la dimisión del director adjunto operativo de la Benemérita, Laurentino Ceña, que dejó ayer su cargo molesto por el despido fulminante de Pérez de los Cobos, y la ha comparado con la del duque de Ahumada, que se negó a cumplir una orden que entendía contraria a derecho del entonces presidente del Gobierno, el general Narváez. «Si Roldán no logró acabar con la Guardia Civil, ustedes tampoco lo harán», ha sentenciado.

Es en ese momento cuando Iglesias ha elevado el tono y le ha echado en cara al diputado del PP una presunta llamada a la «insubordinación» en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. «Sean prudentes, que nos estamos jugando la democracia, señoría», ha concluido Iglesias.