Vuelve el Fútbol
by Lenín RodríguezDespués de una parada obligatoria motivada a la pandemia del Covid-19, muchas de las ligas de fútbol de mayor trascendencia se preparan para retomar una continuidad la cual fue suspendida en marzo de este año.
En Alemania dieron el primer paso y ahora seguirán este ejemplo España, Italia y quizás la más esperada la Liga Inglesa, conocida como la Premier League, en donde quizás se juega el fútbol más competitivo del planeta.
Este retomar de las actividades, nos invita a refrescar nuestros conocimientos sobre el Reglamento, el cual vino a dar su salto cuántico, después de 150 años de haber sido publicado, cuando incorporó la tecnología a través del Video Assistant Referee, en el Mundial Rusia 2018, permitiendo mayor transparencia en las jugadas a ser revisadas por este sistema, alcanzando en aquellos quienes vemos el juego, la satisfacción y la certeza de la correcta aplicación del reglamento.
Pero este reglamento tiene sus ejecutores y como todos sabemos son los Árbitros, con diferentes responsabilidades en el campo de juego, pero con un sólo objetivo, hacerlo cumplir.
En este sentido, quizás la parte medular en un partido, son las faltas estipuladas en la Regla 12, la cual norma y tutela a quienes se apartan del espíritu del juego y de la conducta deportiva, está considerada como el Código de Sanciones del fútbol. En esa importante Regla, el texto califica las faltas y la conducta del jugador y estas infracciones son las que dan lugar a los tiros libres directo o indirecto.
De igual manera, hace mención a las acciones vedadas, las cuales llevan a la amonestación o a la expulsión, su objetivo es privilegiar el juego limpio y competitivo, castigando el juego violento, el juego brusco grave y todo tipo de conductas agresivas, es decir, tener el control efectivo del partido, para ello, es necesario que el árbitro conozca, domine e intérprete los puntos finos o el espíritu establecido en las Reglas de Juego.
En un reciente trabajo del Árbitro Mexicano Mario Rubio Vásquez, quien actualmente se desempeña como Instructor FIFA, para la CONCACAF y quien tuvo su desempeño más destacado a nivel internacional en el Mundial España 82, hacia especial énfasis en la calificación de faltas y de las conductas y partía de tres premisas básicas sobre las cuales se debe sustentar un buen Juez:
1) Se estima que el buen árbitro debe identificar estos dos aspectos (faltas y conductas) porque una vez que tiene esa “habilidad” se podrán tomar mejores decisiones técnicas y disciplinarias consiguiendo tomar el control del partido. Es elemental que el árbitro domine los principios técnicos reglamentarios.
2) Para poder resolver: ¿Qué es una falta? ¿Qué es el contacto físico? ¿Qué es la conducta violenta? ¿Qué es el juego brusco grave? ¿Qué es una oportunidad manifiesta de gol? ¿Qué es tocar el balón con las manos? ¿Qué es obstaculizar a un adversario mediante un contacto físico?
3) El árbitro debe saber calificar las faltas en estas acciones: • El ataque con los pies. • Ataque frontal. • Ataque con deslizamiento. • Ataque por detrás.
Como pueden ver la mente de los árbitros, siempre debe estar en estado de alerta, para resolver todas las situaciones del juego; es fundamental que el árbitro conozca las definiciones de cuando la conducta es incorrecta, cuando antideportiva y cuando violenta.
Saber diferenciar en un juego que se desarrolla por momentos a alta velocidad y que se hace de manera muy viril; aprender a diferenciar cuando aparezcan las “pequeñas” faltas, esas que se consideran normales e inevitables durante la disputa por el balón y que siempre estarán presentes a lo largo del desarrollo del partido, sin que esto quiera decir que se está jugando fuerte y con mala intención.
En la actualidad es imposible que se juegue el futbol, sin el contacto físico al disputar el balón, destacándose los roces, empujones y agarrones. El árbitro y sus Asistentes deben siempre deben estar tan involucrados y sus mentes deben ir en muchas oportunidades previendo que puede pasar y cuando aplicar la ventaja, de manera de hacer más dinámico y lograr el objetivo del juego.
Los Árbitros siempre serán evaluados, no sólo por sus instancias naturales, sino por la crítica más dura y la que nunca está satisfecha y no es otra esa que viene del público en general, sobre todo la de los parciales del equipo perdedor.
Para calificar a los árbitros una de las premisas básicas, es necesario que el Juez demuestre: un criterio equilibrado, justo y adecuado del partido; coherencia, uniformidad, capacidad, habilidad y destreza en la conducción del juego.
Aunque estudios de seguimiento a las actuaciones arbitrales en los juegos avalados por FIFA, así como las ligas de mayor peso en Europa, han demostrados que los Colegiados alcanzan aciertos promedios por encima del 95% en sus decisiones a lo largo del partido, siempre son y serán centro de las críticas.
Definitivamente no es fácil ser Árbitro….
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