Xàbia estima en 12 metros cuadrados el espacio necesario para los que estén en las playas

El concejal Toni Miragall cree que el Gobierno «se ha quedado corto» al fijar solo cuatro y avanza que ya han medido el litoral para calcular la capacidad

Los cálculos del Gobierno de que cada persona que acuda a la playa necesitará contar con un espacio de cuatro metros cuadrados para garantizar la seguridad no acaban de convencer en Xàbia. El concejal de área, Toni Miragall, considera que «se ha quedado corto», ya que cualquier movimiento de la persona dentro de su espacio haría cambiar esos límites. Según apuntó ayer, las estimaciones de su técnico elevarían esa cifra hasta los 12 metros.

El edil admitió que esa cantidad es una primera estimación y que con toda probabilidad al final acabará reduciéndose. Pero insistió en que cuatro serían insuficientes.

De momento, Xàbia ya han medido el litoral para proceder a calcular la capacidad que tendrá cada playa, avanzó. Para obtener el número, deberá tener en cuenta tanto la ocupación de cada usuario como la separación a mantener «del vecino». Según explicó, su idea es dejar expedita la orilla, que se convertirá en una amplia zona de paso. Además, las franjas de cada lateral servirán de área de acceso y salida.

Asimismo, para el Arenal, la zona más concurrida cada verano del litoral de la localidad, se proyecta crear pasillos perpendiculares desde los entradores del paseo Tenista David Ferrer en dirección al agua.

Verano «calentito»

Con todas estas restricciones, el concejal auguró que este verano va a ser «calentito», pero insistió en que los que acudan al litoral deberán respetar las directrices que se marquen. El objetivo es que vecinos y visitantes puedan disfrutar del mar de manera segura y evitar posibles contagios. También están trabajando en el plan de contingencia y de vigilancia para controlar los accesos.

La capacidad de las playas fue uno de los temas que se abordaron en el pleno celebrado ayer en Xàbia por vía telemática. En la sesión también salió a relucir la situación de los chiringuitos, que todavía está en el aire. El alcalde, José Chulvi, señaló que han de estudiar lo aprobado en el BOE del fin de semana y que cuando ya lo tengan todo claro se sentarán con las personas que tienen las concesiones. «Nuestra voluntad es ayudar«, subrayó, y recordó que hay una administración de la que dependen, Costas, que aún se ha de pronunciar.

Por su parte, Kika Mata, concejal de Obras y Servicios, indicó que van a adecuar las playas y que depositarán canto rodado en la zona de Marina Española.