Romper las trabas y la mentalidad importadora en la producción de alimentos

Por Leticia Martínez y Angélica Paredes/ Presidencia Cuba

Por el impacto directo que tiene en el bienestar de la población, principalmente en el complejo escenario impuesto por la COVID-19, otra vez esta semana el chequeo del programa de la producción de alimentos ocupó la agenda gubernamental, en un encuentro de trabajo encabezado por el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz.

El mandatario cubano llamó a los directivos y trabajadores de la industria alimentaria a producir más y a prepararse para cuando el país inicie la etapa de recuperación luego de la pandemia, porque este, aseveró, es un sector estratégico para Cuba.

Al ser un sector estratégico, puntualizó el Jefe de Estado, tiene que impulsar la industria nacional, tiene que exportar y sustituir importaciones, fomentar los encadenamientos productivos con otros sectores, como el turismo, y aportarle a la economía.

El Presidente apuntó además que “en cuanto a pensamiento y maneras de actuar hay que romper todas las trabas y la mentalidad importadora”. De igual manera, reiteró la necesidad de producir alimentos en Cuba, como asunto esencial para el desarrollo.

Todo no se podrá hacer de un golpe, aclaró Díaz-Canel, pero hay que pensar así para que el país se desarrolle. Tenemos que definir “cuáles son los incentivos para quienes trabajen, para que ganen por lo que produzcan, para que deseen producir, para que deseen desarrollar nuevos productos”.

Durante el encuentro, el Primer Ministro Manuel Marrero Cruz llamó a identificar fórmulas que permitan acelerar iniciativas para producir más alimentos. En ese sentido, destacó la necesidad de que el cumplimiento de los planes del gobierno en el sector alimentario se vea reflejado en la mesa de los cubanos.

Instó a fomentar las producciones locales en los territorios, para ello “es necesario que cada municipio haga un estudio de determinadas producciones que pudieran brindar soluciones alternativas, porque tenemos que encontrar la forma de producir más”.

Consideró además que es imprescindible impulsar determinadas exportaciones, que permitan la introducción de divisas a la industria, para su recuperación y desarrollo.

Durante la reunión, en la que también estuvieron presentes el vicepresidente de la República, Salvador Valdés Mesa, y el viceprimer ministro, Jorge Luis Tapia Fonseca, correspondió al titular de la Industria Alimentaria, Manuel Sobrino Martínez, ofrecer una información acerca del comportamiento de las principales producciones durante la primera quincena de mayo, en renglones como los cárnicos, lácteos, conservas de frutas, harina de trigo y de maíz, y la pesca, entre otras líneas de producción.

De igual manera, el ministro de la Agricultura, Gustavo Rodríguez Rollero, informó acerca del cumplimiento de la preparación de tierra, siembras y entrega de productos durante el mes de mayo en todo el territorio nacional, haciendo énfasis en el plan de siembra de arroz, la campaña de primavera, las siembras de maíz, el  balance de viandas, hortalizas, granos y frutas, la entrega de leche a la industria, el comportamiento de la producción de huevos y de carne de cerdo, entre otros indicadores.

El encuentro de trabajo, realizado en el Palacio de la Revolución, ratificó que en la medida en que se potencien nuestras producciones agrícolas y de la industria alimentaria, Cuba logrará satisfacer las necesidades de la población y propiciará un avance de estos sectores claves para el desarrollo de la nación.