La OMS detiene los ensayos con hidroxicloroquina, el fármaco por el que apuesta Trump, al detectar una mayor mortalidad
Un estudio publicado por The Lancet ha llevado también a Francia a replantearse su uso
by redacción / agenciasEl director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, anunció hoy que el organismo detendrá temporalmente los ensayos clínicos con hidroxicloroquina en pacientes de COVID-19, al haberse detectado un mayor índice de mortalidad en estos enfermos.
La decisión, una medida de cautela que podría ser revisada, se ha tomado tras la publicación el pasado viernes en la revista médica The Lancet de un estudio en el que se señalaban mayores tasas de mortalidad en pacientes en los que se habían ensayado tratamientos con hidroxicloroquina, usada habitualmente contra la malaria.
La medida cautelar, que podría afectar a países como Brasil (quien la semana pasada había aprobado el uso generalizado de la hidroxicloroquina en pacientes de COVID-19) en principio no se aplica a la cloroquina, de la que la anterior es un derivado y que también está incluida en los ensayos clínicos de la OMS.
La hidroxicloroquina es un medicamento defendido y promovido por Donald Trump para el tratamiento del coronavirus. El presidente llegó a confesar incluso que lo tomaba de forma preventiva, y que muchos facultativos también lo estaban haciendo.
Por su parte, Francia ya había anunciado el pasado fin de semana que se replantearían el uso de hidroxicloroquina en hospitales para tratar a pacientes de la COVID-19, después del estudio que muestra que no ofrece beneficios para estos pacientes y puede tener efectos secundarios.
«Tras la publicación en The Lancet de un estudio alertando de la ineficacia y de los riesgos de algunos tratamientos de la COVID-19, entre ellos la hidroxicloroquina, he pedido un estudio a la inspección de medicamenos para que haga un análisis», señaló el ministro de Sanidad, Olivier Véran, en la red social Twitter.
Véran precisó que aguarda respuestas en las próximas 48 horas y que, tras las mismas, harán una revisión de las normas de prescripción del medicamento y, en su defecto, de su derogación.
Un amplio estudio observacional sugiere que el tratamiento con el fármaco antipalúdico cloroquina o su análogo hidroxicloroquina no ofrece ningún beneficio a los pacientes con COVID-19 y, por el contrario, estos medicamentos pueden provocar un aumento de las tasas de mortalidad y un incremento de las arritmias cardíacas entre los pacientes de COVID-19 hospitalizados.
El estudio de The Lancet analiza datos de casi 15.000 pacientes con COVID-19 que recibieron cloroquina o su análogo, la hidroxicloroquina, y datos de 81.000 pacientes control. Los pacientes son de más de 600 hospitales. Antes de estos estudios, Francia ya restringía este tratamiento a pacientes hospitalizados y a los casos más graves.
Sin embargo, un prestigioso epidemiólogo francés, Didier Raoult, afincado en Marsella, defendía su eficacia en pacientes de coronavirus, lo que recibió el apoyo de ciertos sectores políticos del país.