Descubren el mecanismo subyacente que asocia la diabetes al desarrollo de la esteatohepatitis no alcohólica
MADRID, 25 May. (EUROPA PRESS) -
Investigadores japoneses han aclarado el mecanismo subyacente en el desarrollo de diabetes la esteatohepatitis no alcohólica (NASH), una forma grave de hígado graso, y han revelado que la acción insuficiente de la insulina en los adipocitos conduce a defectos metabólicos que afectan a todo el cuerpo a través de la hiperactivación de la proteína FoxO1, que a su vez resulta en el desarrollo de diabetes y NASH.
El trabajo lo han desarrollado el profesor OGAWA Wataru de la División de Diabetes y Endocrinología, Escuela de Graduados de Medicina de la Universidad de Kobe y el profesor Asociado del Proyecto HOSOOKA Tetsuya de la división de Desarrollo de Terapia Avanzada para Enfermedades Metabólicas, Escuela de Graduados de Medicina de la Universidad de Kobe.
La vía revelada por el estudio, que ha sido publicado en 'Proceedings of the National Academy of Sciences of the USA', podría servir como un objetivo potencial para el desarrollo de nuevos medicamentos para estas afecciones.
NASH es una enfermedad hepática crónica a menudo asociada con diabetes. A veces progresa a afecciones más graves, como cirrosis hepática y cáncer de hígado. Sin embargo, el mecanismo por el cual se desarrolla NASH es ambiguo y no hay medicamentos aprobados para la enfermedad.
La diabetes y la NASH se desarrollan como resultado de una acción insuficiente de la hormona insulina en las células grasas. Esta acción insuficiente de la insulina en las células grasas conduce a la sobreactivación de FOXO1, que a su vez provoca el desarrollo de diabetes y NASH. Actualmente, existe una demanda de mejores medicamentos para la diabetes y, además, actualmente no hay un tratamiento disponible para la NASH.
La vía descubierta en este estudio serviría como un objetivo potencial para el desarrollo de nuevos medicamentos para estas afecciones. El equipo de investigación del profesor Ogawa descubrió que la acción insuficiente de la insulina en los adipocitos provoca la hiperactivación de la proteína FoxO1, que a su vez conduce al desarrollo de diabetes y NASH a través de la alteración del metabolismo de todo el cuerpo.
El vínculo entre la acción insuficiente de la insulina en los adipocitos y la NASH no se ha propuesto hasta ahora. Además, el equipo de investigación descubrió que la hiperactivación de FoxO1 causó un aumento abundante de leucotrienos B 4, y que esta sustancia que causa inflamación tiene un papel importante en el inicio de la disfunción metabólica.
INVESTIGACIÓN EN RATONES MODIFICADOS
La insulina es una hormona importante que regula el metabolismo de todo el cuerpo, y la acción insuficiente de la insulina, a menudo llamada "resistencia a la insulina", sirve como base para diversas enfermedades. El equipo del profesor Ogawa generó ratones en los que PDK1, una proteína esencial para la acción de la insulina, era deficiente solo en los adipocitos. Estos ratones exhibieron una acción de insulina ineficiente no solo en los adipocitos sino también en todo el cuerpo, lo que condujo al desarrollo de diabetes y NASH.
Se sabe que la insulina suprime la actividad de la proteína FoxO1 mediante la activación de PDK1. Por lo tanto, el equipo generó ratones que carecían de FoxO1 y PDK1 solo en sus adipocitos para evaluar si la hiperactivación de FoxO1 contribuye al desarrollo de diabetes y NASH, y descubrió que estas dos condiciones no se manifestaron en absoluto en los ratones.
Estos resultados indican que la acción ineficaz de la insulina en los adipocitos desencadena la diabetes y la NASH a través de la sobreactivación de FOXO1, que culmina en la resistencia a la insulina en todo el cuerpo. Los investigadores examinaron además el mecanismo de cómo la hiperactivación de FoxO1 influye en las funciones de otros órganos.
Posteriormente revelaron que FoxO1 es capaz de aumentar la cantidad de la proteína 5-lipoxigenasa, una proteína responsable de la producción de la sustancia inflamatoria leucotrieno B4. En ratones con deficiencia de PDK1 específica de adipocitos, la inhibición de la producción o la función de leucotrienos B4 mejoró la diabetes, lo que indica que la hiperactivación de FoxO1 desencadena diabetes a través de leucotrienos B 4actividad. El equipo también reveló que la sobreactivación de FoxO1 y la consiguiente regulación positiva de la 5-lipoxgenasa también se produjo en los tejidos adiposos de ratones obesos normales alimentados con una dieta que contenía una gran cantidad de grasa.
Esta investigación reveló que la diabetes y la NASH se desarrollan como resultado de una acción insuficiente de la insulina (es decir, resistencia a la insulina) en los adipocitos, lo que condujo a la activación exagerada de FoxO1 y la posterior regulación positiva del leucotrieno B4.
El vínculo entre la insuficiente acción de la insulina en los adipocitos y la aparición de NASH, así como la capacidad de la insulina para controlar la producción de leucotrienos B4 son nuevos descubrimientos que no se habían planteado como hipótesis.