Los sindicatos de Nissan piden al Gobierno trabajar juntos para mantener la planta de Barcelona

• El objetivo es conseguir un futuro a largo plazo a través de las inversiones

Los comités de empresa de Nissan han pedido este lunes al Gobierno, en una reunión telemática con el secretario general de Industria y Pyme, Raúl Blanco, "soporte y seguir trabajando de manera conjunta para entre todos darle la vuelta a esta situación".

A sólo tres días de que la automovilística nipona presente sus planes para todo el mundo, lo que incluye sus plantas en España, las organizaciones sindicales redoblan sus presiones a las administraciones públicas para que intercedan por los 25.000 trabajadores que dependen de la marca de manera directa o indirecta.

Además de mantener una huelga indefinida en Barcelona que cumple 22 días, los comités de Nissan han asegurado que no se quedarán de "brazos cruzados" esperando el anuncio que haga la multinacional nipona el 28 de mayo.

Además, el comité de empresa ha informado de que la empresa les ha comunicado que renuncia a la posibilidad de pasar a los trabajadores de la Línea 2 al Expediente Temporal de Regulación de Empleo (Erte) de fuerza mayor, como anunció en su día, y les pagará todos los días desde el 6 de mayo al 2 de junio como permiso retribuido.

Por parte del Gobierno, los comités han afirmado que Raúl Blanco les ha transmitido que si abandonan el marco español abandonan el marco de la Unión Europea, con las consecuencias económicas y pérdida de mercado que ello puede acarrear.

Asimismo, los comités aseguran que el secretario general de Industria y Pyme les ha comunicado que "si Nissan decide cerrar su planta de Barcelona, no habrá futuro para ninguna factoría en España, dando poca viabilidad a las empresas auxiliares". La compañía nipona cuenta con cinco fábricas en España, de las que tres están en Barcelona (Zona Franca, Montcada i Reixac y Sant Andreu de la Barca), otra en Ávila y otra en Los Corrales de Buelna (Cantabria).

El objetivo por parte del Ejecutivo, el cual ha mantenido reuniones con el presidente de la compañía, Makoto Uchida, es conseguir un futuro a largo plazo (diez años), gracias a las inversiones. Y es que Nissan lleva más de una década sin invertir en sus líneas de producción en España.

Según los sindicatos, Raúl Blanco ha subrayado que todas las administraciones públicas están trabajando de manera coordinada con este mismo objetivo, desde el Gobierno y la Generalitat catalana, hasta el Ayuntamiento de Barcelona y el Consorcio de la Zona Franca de Barcelona.

Los sindicatos llevan semanas, e incluso meses, alertando de que la firma automovilística podría optar por cerrar sus centros en Cataluña, lo que acabaría por afectar a las otras plantas en España, un temor que ha ido a más por las informaciones en este sentido publicadas por medios japoneses.

Este mismo lunes, Blanco ha alertado a Nissan de que marcharse de España y de la Unión Europea (UE) le va a salir "mucho más caro" que invertir en la fábrica que la empresa tiene en Barcelona y ha cifrado este coste en unos 1.000 millones de euros.