Efecto pandemia: 9 de cada 10 familias argentinas están endeudadas
La deuda total de las familias creció 9,5% en un mes y al 22 de mayo alcanzó los $1.821.704 millones, afectando a 12,1 millones de hogares, que equivalen al 87,7% de los hogares del país (casi 9 de cada 10). Frente a abril, 955 mil hogares más pasaron a tener deudas, principalmente no bancarias.
En promedio cada familia adeudaba en mayo 150.686 pesos. Ese monto no incluye los costos asociados a moras y retrasos, que fueron en incremento con los días en cuarentena y podrían incrementar en más de 50% ese stock.
Así surge de cruzar los datos del Banco Central con una encuesta entre 6089 hogares realizada por CERX entre el 17 y 22 de mayo para monitorear la evolución de esta variable fundamental para conocer el impacto socio-económico de la pandemia y las posiblidades reales de recuperación del consumo post covid.
El stock de deuda tiene dos grandes componentes: por un lado, la deuda "no bancaria" que estimamos en $633.994 millones, 25,9% más que en abril. Unos 12 millones de hogares pasaron a tener algún tipo de esas deudas al 22/5 (87,1% de los hogares del país). Y por otro, la deuda "bancaria" que según el BCRA alcanzó los $1,2 billones a fines de abril.
Para la mitad de los hogares, 49,5%, sus deudas fueron consecuencia de la cuarentena y la pandemia. Para el 23% fueron provocadas antes de este episodio mientras que el 27,6% restante identifica a sus deudas como generadas tanto antes como durante esta emergencia sanitaria. Especialmente las deudas no bancarias son consecuencia de la actual crisis económica.
Deuda "no Bancaria"
De acuerdo al informe, lo más frecuente en mayo fueron los atrasos en impuestos, que acumuló deudas por $149.270 millones, 48,6% más que en abril. Tanto en abril como mayo las familias dejaron de pagar impuestos como el inmobiliario, patentes, y otros nacionales. Explica ese item el 23,5% de la deuda no bancaria actual.
Habría 6,9 millones de hogares con algún tributo adeudado al 22 de mayo, ya sea nacional, provincial o municipal, frente a 6,3 millones que había en abril. La deuda promedio fue de $21.590 por hogar.
Siete de cada 10 hogares acumulaban deudas por servicios como luz, gas, agua, teléfono, cable o internet en mayo. El stock total alcanzó los $142.930 millones. Con una deuda promedio de $14.683 por familia, explicó el 22,5% de la deuda no bancaria. En abril había sido la mayor deuda acumulada. Pero en mayo fue superada por las deudas impositivas.
El tercer endeudamiento de peso este mes fue con familiares y amigos, a quienes recurrieron muchos hogares para subsistir. De acuerdo a la encuesta, estimamos en $116.257 millones (18,3% de la deuda no bancaria). Afecta a 2,5 millones de hogares, con un monto promedio de $45.509 cada uno.
Un items que creció mucho en mayo fue el stock de deuda no bancaria con comercios por ventas en la modalidad "fiado" y prestadores de servicios. Ascendió a $21.956 millones, 381.1% arriba de mayo. En este último componente las más mencionadas fueron deudas con farmacias, almacenes, zapaterías, contadores, y servicios profesionales en general, que subieron fuerte en el último mes, especialmente en ciudades chicas.
Deuda "Bancaria"
La deuda bancaria de las familias según los datos del BCRA a fines de abril sería de $1.187.110 millones (casi $1,2 billones). Los principales componentes fueron:
Tarjetas de crédito y personales: el stock adeudado por tarjetas asciende a $561.999 millones (+4,9%) y por préstamos personales a $405.312 millones (-0,1%).
Créditos hipotecarios y prendarios: considerando que según el BCRA el 81% de los hipotecarios y el 63% de los prendarios van a familias, suman $220.399 millones.
Las familias volvieron a dejar de pagar compromisos y acumular deudas por las restricciones de ingresos del mes. Especialmente deudas no bancarias que son las asociadas netamente con situaciones de ingresos críticas. Si bien las ayudas del Estado compensaron, se usaron mayormente para cubrir gastos corrientes. Lo mismo con los ingresos proveniente de la flexibilización de actividades.
Lo que no creció significativamente fue el stock de deuda bancaria, en parte porque se dejaron de pedir préstamos personales y porque las tarjetas de crédito comenzaron a recibir la acreditación de créditos a tasa cero, que se usaron para cubrir los mismos pagos. Esta deuda suele estar muy asociada a periodos de auge, situación contraria a la actualidad. Su estabilidad tiene más que ver con deudas acumuladas impagas que con la toma de nuevos créditos.
Estimamos que el stock de deuda no bancaria seguirá creciendo en los próximos 60 días, para recién comenzar a ceder a partir de agosto. Un punto favorable es que se redujo de 12,5% en abril a 4,1% en mayo el porcentaje de hogares sin ingresos. No alcanza, pero ayuda.
A esta altura, tanto las deudas bancarias como no bancarias requerirán negociaciones entre partes para cancelarse. En el caso de las bancarias, las entidades financieras están ofreciendo descuentos de hasta 40% en intereses y moras, pero si se cancela la totalidad de la deuda, algo difícil en este momento.
En las deudas no bancarias, se esperan negociaciones para cancelar por ejemplo, alquileres adeudados y cuotas de colegios especialmente. En las deudas impositivas, muchas familias descuentan que el Estado tomará cartas en el asunto.