Se prepara “nueva normalidad” y reapertura económica, pese al aumento de contagios de coronavirus

Los temas de la mañanera: economía y nueva "normalidad"

En la mañanera de hoy, AMLO anunció que continúan los preparativos para la “nueva normalidad”, que particularmente en lo que hace al regreso a clases, tendrán que ser consultados con docentes, padres y madres de familia.

Anunció con mucha alegría que se encuentra cerca la reapertura económica, en especial de la industria de la construcción, automotriz, la minería y la maquila, como resultado de la presión imperialista de la Casa Blanca y el Pentágono, a raíz del funcionamiento binacional de las cadenas de valor que atraviesan la frontera norte.

Con 7394 defunciones por coronavirus y 68, 620 casos confirmados, la curva de contagio sigue en ascenso, poniendo en duda la conveniencia de reactivar la producción de sectores no esenciales para la producción de insumos que permitan enfrentar la pandemia, como autos o infraestructura que no será para nuevos hospitales.

Resultan preocupantes las declaraciones de AMLO sobre la “nueva normalidad”: “Decirles que, de acuerdo a los informes que tenemos, ya vamos de salida. Desde luego, no debemos confiarnos, no relajar las medidas de prevención, seguir las recomendaciones hasta el fin de semana que termina esta etapa”.

Y es que todo indica que el siguiente lunes 1 de junio, la “nueva normalidad” se impondrá sobre una estela de muertos incalculable (ya que muchas de las defunciones por neumonía atípica no son investigadas para determinar si la causa fue coronavirus), y a base de exponer a millones de trabajadores al contagio.

La gran necesidad de las más de 31 millones de personas que trabajan en la informalidad y viven al día, la de quienes engrosan los 2 millones de despidos generados por la pandemia, así como la negativa del gobierno de prohibir los despidos y obligar a las patronales a cubrir íntegramente los salarios durante las suspensiones por la crisis sanitaria, es la base sobre la cual el gobierno se apoya para reactivar la economía.

La necesidad y el hambre de millones que se desprendió del respeto y protección del gobierno de la 4T a las fortunas de los grandes empresarios, en lugar de financiar con estas salarios de cuarentena e insumos necesarios para que los sectores populares no cargaran con los costos de la crisis.

Lejos de esto, el aumento en la recaudación tributaria que tanto presume el presidente fue garantizado por el pago puntual de impuestos de pequeños contribuyentes, recortando los ingresos de quienes menos perciben y permitiendo que grandes transnacionales, como Walmart o las empresas de Salinas Pliego, libren los impuestos.

AMLO anunció también que este año se generarán nuevos empleos, vinculados a la construcción de proyectos públicos y megaproyectos, como el Tren Maya. AMLO apeló a este tipo de mecanismos para garantizar el reimpulso de la economía, sin recurrir a un mayor endeudamiento público con organismos financieros internacionales (aunque, claro está, manteniendo el pago puntual de la ilegítima deuda externa que ya se come la mitad del presupuesto público).

También se refirió a los programas sociales de apoyo que dieron empleo a cientos de miles de jóvenes a partir de profundizar la precarización laboral y negar la relación laboral con los y las trabajadoras, como el programa de Jóvenes Construyendo el Futuro, que funcionará para las licitaciones que dejarán que grandes empresas construyan el mismo Tren Maya.