A Coruña: Okupan otra casa de 810.000 euros y le ponen cámaras de seguridad
El chalé está a 400 metros de la mansión coruñesa en la que se metió una familia
by alberto mahíaLa okupación se ha asentado en el lujo. Se está viendo en A Coruña. Sobre todo, en una de las zonas más exclusivas, en A Zapateira, donde las casas rondan el millón y desde donde se alcanza a ver toda la ciudad, y en los días claros hasta la entrada de la ría de Ferrol. En uno de esos chalés de infarto, en una mansión que se encuentra a la venta en los portales inmobiliarios por 750.000 euros, una familia se metió a vivir hace dos meses y ahí sigue. Llegando incluso a denunciar ante la Guardia Civil que les habían cortado el agua. Hace unas semanas, otras personas hicieron lo mismo en una casa muy cercana a la anterior. A unos 400 metros. En una web inmobiliaria aparece tasada en 810.000 euros.
Son muy distintas la una de la otra. Solo se parecen en el precio. La primera, en la calle Aguaceiros, es de arquitectura inglesa y cuenta con 610 metros cuadrados construidos. Ya tiene sus años. La segunda, en el número 31 de la avenida de Nueva York, es de diseño modernista. La terminaron hace poco más de uno y las tullas no dejan ver más que un original tejado con forma de luna.
Cuentan los vecinos que cuando fue ocupada «por unas tres personas», a los pocos días pudieron desalojarlos. Alguien vio cómo los supuestos usurpadores salían de la casa para dar un paseo y avisó a la inmobiliaria, que envió a gente, acompañada de policía, para cambiar la cerradura y recuperar el inmueble. La normalidad apenas duró dos días. Regresaron, forzaron de nuevo la entrada y desde entonces continúan viviendo en ella. Pero rodeados de medidas de seguridad. Destinadas, se supone, a que no les vuelva a suceder y verse de nuevo en la calle.
Sensor de movimiento
Residentes de la zona afirman que los okupas instalaron cámaras de seguridad en las zonas estratégicas de la finca. Incluso, algunos focos con sensor de movimiento. Ya no son tres personas, dicen. «Hay días que son ocho, otros seis. Es un ir y venir de gente que anda a sus anchas por la zona», aseguran. Eso sí, «no se meten con nadie».
Muchas veces se ve salir a alguno acompañado de dos perros de raza peligrosa. Da un paseo y regresa al chalé, también propiedad de una entidad bancaria.
Llama también la atención de los vecinos que tienen las luces encendidas durante las 24 horas del día. «Nunca están apagadas», cuentan.
El chalé, de grandes muros, se ofrece así en un portal inmobiliario: «Vivienda independiente con parcela en zona residencial. Buenas vistas, altas calidades». Tiene semisótano, planta baja y dos pisos que suman 580 metros cuadrados. La finca es de mil. No tiene piscina, pero sí bodega.
Los vecinos dicen estar «muy preocupados» por esta oleada de ocupaciones en la zona. Hay varias mansiones vacías más.