Santiago: Raxoi blindará el acceso rodado al casco viejo con 16 puntos de control
Habrá otras cuatro entradas con bolardos móviles y cinco con lectores de matrícula
by R. MartínezEl Ayuntamiento ampliará la dotación de bolardos electrónicos en torno al casco viejo para controlar el acceso rodado al corazón de la zona monumental y asegurar que solo entran los vehículos autorizados. Ahora mismo hay siete puntos de control con esos elementos, pero la implantación de las nuevas directrices del programa Smartiago para regular la movilidad en la zona e incidir en el cuidado del pavimento sumará otros cuatro a los ya existentes en Casas Reais, Algalia de Abaixo, Cardeal Paiá, Porta da Pena, plaza de San Fiz, San Francisco y Algalia de Arriba.
Los bolardos se extenderán también a Carretas, Trindade, Porta Faxeira y Travesa de Fonseca para asegurar la contención de tráfico no autorizado en el ámbito, pero no será ese el único mecanismo de control. Aunque sin optar por las barreras físicas, que se abren solo con autorización, otros cinco puntos incorporarán lectores de matrículas, lo que elevará hasta 16 las vías con vigilancia expresa sobre la actividad rodada. En este caso, la inspección se ejercerá sobre Costa Vella, Rúa do Castro, Oliveira y Entremuros, además de en Porta da Mámoa, aunque esta es una calle de uso únicamente peatonal.
Los puntos ya existentes se renovarán completamente. Tanto los bolardos móviles como los fijos, que serán del mismo material y características de diseño y dimensiones que los móviles. Los fijos se mantendrán en la misma localización de los que sustituirán. Y probablemente los móviles también, aunque eso no evitará la realización de obra, porque los nuevos precisan mayor hueco para su instalación.
Los terminales que permiten el funcionamiento de esos accesos serán sustituidos igualmente por otros de tecnología más avanzada y sostenible (para la subida y bajada del bolardo se pasará a un sistema neumático, descartando el electrohidráulico actual) e incorporarán vídeo-portero para mejorar la comunicación con el centro de control de tráfico de la Policía Local. Actualmente en fase de contratación, dispondrán igualmente de cámara registradora de aforos con tecnología de reconocimiento automático de matrículas (será capaz de reconocer matrículas de cualquier país de la Unión Europea), con alta resolución y emisión de vídeo en tiempo real.
Se trata de aportar mejores condiciones de gestión, tanto técnica como de control y organización de la movilidad en el ámbito, lo que exige también la dotación del software y el hardware necesarios para la interconexión de la plataforma de gestión integradora de todo el circuito.
Compatibilidad de programas
Los programas deberán ser compatibles, en cualquier caso, con las aplicaciones existentes y con las que se prevé instalar en el futuro. Porque aparte de las funciones básicas (autorizar o denegar accesos desde el equipo de control, mantener listas de usuarios, definir tablas de horarios de funcionamiento de un determinado acceso...), los nuevos mecanismos deberán ser compaginables también con los sistemas que el Concello prevé contratar más adelante a través de los procedimientos de compra pública innovadora (sujetos ahora mismo a la consulta del mercado) para una gestión más sostenible y respetuosa con la conservación del patrimonio histórico.
El siguiente paso, el que aportará esa innovación adaptada a las necesidades de la ciudad, incidirá en la ordenación de cuestiones como la carga y descarga (una actividad regulada, pero poco ordenada ahora mismo) y la presión de la movilidad en la zona. Se instalará un sistema de pesado de vehículos, medidores de permanencia en el ámbito monumental y contador de unidades presentes a un tiempo, así como elementos de verificación y comprobación de las rutas prediseñadas y a realizar por los vehículos.
Porta Faxeira tendrá un elemento móvil en un plan que quiere minimizar el impacto visual
Todos los puntos de control con bolardo deberán incorporar semáforo, pero las ofertas para la renovación del conjunto deberán minimizar también el impacto de las instalaciones en la imagen del casco histórico. La gestión de los accesos exige tecnologías punteras, pero también criterios de integración y armonización con el entorno que llevan a requerir modelos que reduzcan el tamaño de aquellos elementos en los que esa condición sea posible, limiten a lo imprescindible el número de elementos verticales y procuren la integración de todos ellos en un mismo soporte. En ningún caso sus acabados podrán ser de pulido brillante.
En los accesos que cuentan ya con cámara, esta será sustituida también por unas más avanzadas, salvo en San Francisco, el punto de más reciente actualización. Entre las que se renovarán estará Porta Faxeira, la principal entrada al casco viejo por el centro urbano y que hasta ahora prescindió de bolardo móvil. Pero el nuevo plan la dotará de él, además de los fijos precisos (se estima que 9 en este caso) para delimitar la zona de acceso rodado.