Ribó otorga una veintena de contratos a dedo rozando el límite legal en tres meses

Un encargo de material de oficina se quedó a un euro del tope, mientras el PP denuncia que desde 2015 se han producido 15.000 adjudicaciones

Un contrato menor carece prácticamente de cualquier control, transparencia y libre concurrencia. Como mucho un concurso por invitación para recibir tres ofertas, aunque hay ocasiones en que esto no se produce como ocurrió con la adjudicación del diseño de la plaza del Ayuntamiento. El gobierno municipal de Compromís y el PSPV ha sumado en los tres primeros meses de este año 363 encargos, de los que una veintena se acercan a la 'mágica' cifra de 15.000 euros, el máximo sin IVA para contratos de servicios o suministros.

Del listado colgado en la web, como ayer desveló la viceportavoz del grupo popular en el Consistorio, María José Ferrer, sorprenden los que están separados por apenas unos euros del tope. El récord lo tiene un pedido de material de oficina por 14.999 euros, rozando lo imposible.

La edil señaló que la publicación de los datos se ha realizado a petición de su grupo. Sea como sea, aparece sólo el epígrafe del concurso y los datos básicos, es decir, la empresa, la cuantía del contrato, su duración y el tema. Sin que los grupos de la oposición puedan tener más acceso a los expedientes sin pedirlos al gobierno municipal.

Echando la vista atrás, el resultado del primer trimestre es satisfactorio en comparación con lo ocurrido en años anteriores. Desde 2015, año de mandato compartido entre el PP (primer semestre) y Compromís y PSPV en la segunda parte, las concejalías y la alcaldía han firmado más de 15.000 contratos a dedo, algunos de escaso gasto y calado, pero otros relevantes para la ciudad.

Ferrer San Segundo recordó la moción aprobada al PP en la comisión de Participación de esta semana, para que los contratos menores que firma el Ayuntamiento se publiquen en el portal de transparencia «de manera inmediata automatizada al mismo tiempo que se formalizan».

El pasado ejercicio, el gobierno municipal se gastó más de 14 millones de euros en contratos directos. El referido del diseño de la plaza del Ayuntamiento fue rubricado el 11 de julio, sólo cuatro días después de iniciarse el expediente y tres de que se pidiera precio a la empresa que resultó la adjudicataria.

El tope de presupuesto de los contratos menores varía en función de si se trata una obra (40.000 euros) o una adjudicación de servicios y suministros con los citados 15.000 euros, siempre sin IVA. De todos los ejercicios que ha gobernado el alcalde Joan Ribó, fue en 2017 cuando se alcanzó la cifra más alta al situarse en 3.848 casos.

Además se da la circunstancia de que la modificación legal de 2019, cuando el tope sin IVA bajó de 18.000 a 15.000 euros, no ha variado sustancialmente el volumen del gasto de las concejalías de este modo. En 2019 fueron todavía 2.463 expedientes.

Ferrer San Segundo explicó que el acuerdo con el gobierno municipal implica que «se comprometen a fijar un calendario dentro del plazo de dos meses para conectar el registro digital de contratos menores con el portal de Transparencia del Ayuntamiento». La edil dijo por último que el Consistorio «estará habilitado para publicar los contratos menores nada más se firmen por las partes». En la actualidad tardan en publicarse entre 3 y 4 meses después de que se formalicen. «Se llaman contratos menores y no son cosa menor porque constituyen un altísimo porcentaje de los que firma el Ayuntamiento y porque es un terreno donde, recurrentemente, se han detectado irregularidades en los últimos años».