Alemania rechaza poner un límite de velocidad a sus autopistas
La propuesta de poner una velocidad máxima de 130 kilómetros por hora estaba respaldada por una mayoría de la población y por organizaciones ecologistas
by Enrique MüllerAlemania seguirá siendo el paraíso de los conductores que aman la alta velocidad. El Consejo Federal alemán (Bunderat), la Camara que representa a los 16 estados federados, ha rechazado este viernes poner un limite de velocidad en la famosa red de autopistas del país, por lo que los vehículos podrán seguir circulando a velocidades vetadas en la mayoría de los países europeos.
La medida había sido una propuesta del Comité de Medio Ambiente de la Camara Estatal y los representantes de los estados federados debían votar a favor o en contra de imponer un limite de velocidad de 130 kilometros por hora. El partido Socialdemócrata (SPD) y los Verdes habían apoyado la propuesta, pero los dos partidos democratacristianos, la CDU y la CSU de Baviera, así como el partido Liberal (FDP), se oponían a los nuevos límites.
La complicada relación política que se da en el seno de los gobiernos regionales acabó por tumbar la iniciativa, que estaba respaldada por una mayoría de la población y por numerosas organizaciones ecologistas que luchan contra la contaminación en las ciudades. Si las coaliciones políticas que forman los gobiernos regionales son incapaces de llegar a un acuerdo, el estado debe abstenerse en el Bundesrat. Antes de la votación del viernes, Sajonia-Anhalt, Sajonia, Turingia y Hesse ya habían declarado que se abstendrían.
El limite de velocidad en las autopistas germanas había causado a fines del año pasado una agria polémica en el seno del gobierno de gran colación a causa de las diferentes opiniones que existen al respecto entre los tres partidos que integran la coalición, el SPD, la CDU y la CSU. Los socialdemócratas estaban a favor de poner un limite con el objetivo de reducir los accidentes mortales y también las emisiones contaminantes.Pero los dos partidos democratacristianos siempre se opusieron a la medida por considerar que un limite de velocidad en las autopistas podría ocasionar problemas serios a los gigantes de la industria automotriz alemana, como Mercedes Benz, BMW, Audi y a la emblemática fabricas de coches deportivos Porsche.
En el mes de octubre del año pasado, los verdes intentaron hacer aprobar el limite de velocidad en el Parlamento Federal, el Bundestag, pero la medida fracasó rotundamente, ya que incluso cosechó los votos en contra del SPD. Pero la nueva dirección del partido socialdemócrata se mostró a favor del limite de velocidad, una decisión que envenenó las relaciones internas de la coalición.
El limite de velocidad fue recuperado finalmente por el Comité de Medio Ambiente del Bundesrat y fue incluido en un paquete de enmiendas a la Ley de Tráfico Vial, que tienen por objeto, por ejemplo, hacer más seguro y atractivo el uso de la bicicleta en la ciudad. Poco después de conocerse el resultado de la votación, el primer ministro de Sajonia, Michael Kretschmer (CDU), defendió su voto en contra en un mensaje de Twitter: "Alemania tiene suficientes leyes, regulaciones y prohibiciones, no necesitamos añadir otra".
La organización ambiental Deutsche Umwelthilfe (DUH) expresó, por su parte, su decepción por el fracaso del Bundesrat en la protección del clima en un comunicado de prensa venenoso: ”Una vez más las sedes de BMW, Daimler y VW han demostrado que la política de transporte en Alemania no está determinada por los representantes electos del pueblo, sino por el grupo de presión industrial más poderoso de Alemania”.