Vulnerable el sistema tecnológico gubernamental

La mayoría de las agencias públicas ha sido víctima de fraude cibernético

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Suministrada

La falta de adiestramiento y capacitación del personal, así como la falta de tecnología adecuada para detectar a tiempo cualquier tipo de fraude cibernético, han sido los detonantes que han hecho del sistema tecnológico del gobierno de Puerto Rico uno altamente vulnerable, sostuvo el experto en tecnología, Wilton “El Tecnético” Vargas.

Acorde con Vargas, esta repetitiva práctica de vulnerabilidad de la cual han sido objeto agencias como los departamentos de Hacienda, de la Familia, de Transportación y Obras Públicas, de Desarrollo Económico y Comercio (DDEC), la Compañía de Turismo y el Sistema de Retiro, solo demuestra que en el gobierno no existe personal educado, capacitado ni adiestrado en el campo, por lo que resulta ser una presa fácil para las personas que perpetúan este tipo de fraude. A ello sumó que este tipo de ciberataque suele traer consigo varios efectos negativos.

En el más reciente caso —donde a través de un email indican un cambio de cuenta— el peligro lo representa la pérdida de millones de dólares, fondos que ante la situación económica precaria que vive el País redundan en menores recursos económicos para ofrecer ayudas y servicios al pueblo. De igual manera, se presta para brindar acceso al delincuente a los datos importante de las personas, como fue el caso de Hacienda hace unos años, cuando hubo acceso a la información de los contribuyentes.

“Hoy se vive en un mundo altamente conectado, donde a través de un email se hace fácil hacerse pasar por otra persona. En vista de esto, se necesita un personal altamente capacitado que pueda identificar cualquier transacción sospechosa y actuar de inmediato. De eso no suceder —porque a cualquier cazador se le va la presa— el sistema tecnológico debe ser lo suficientemente ágil para detectar que algo no está bien. Ambos, el hombre como la tecnología tienen que ser filtros que eviten que este tipo de delito avance. El gobierno tiene que asignar recursos humanos y tecnológicos para hacer frente a esta práctica. En este caso del DDEC, ambos elementos —el usuario y la tecnología— fallaron”, afirmó Vargas.

La querella presentada por el DDEC señala que a través de un email transfirieron a una cuenta fraudulenta $2.6 millones destinados a las pensiones que administra el Sistema de Retiro, pero se logró la pronta intervención del Negociado Federal de Investigaciones (FBI) para congelar la cuenta. Esto no siempre termina así.

Según ha trascendido, millones de dólares de otras agencias, que debieron ser depositados electrónicamente en las cuentas de Retiro como aportación a las pensiones, han ido a parar a cuentas creadas fraudulentamente. Entre las agencias que se menciona figuran la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) y la Autoridad de Carreteras y Transportación (ACT).

A mediados de enero la Compañía de Fomento Industrial (Pridco) había denunciado otra transacción fraudulenta de $63,000 y la Compañía de Turismo una por $1.5 millones.