PORTILLAZOS INTERNACIONALES / Un trastornado, un impopular y un astuto
by Ramón Figuera1
. Una de las primeras enseñanzas que enseñan en todo curso sobre el sistema político de Estados Unidos es que las guerras suelen revertir la declinante popularidad de los presidentes. Con una tasa de aprobación de Donald Trump del 45 % en diciembre del 2019, los déficit comercial y fiscal creciendo inconteniblemente, así como la deuda pública y una amenaza de juicio político en su contra, los consejeros y asesores del locato Trump tal vez le recomendaron que apele al tradicional recurso e inicie una guerra (o una operación militar de alto impacto) para recomponer su popularidad y situarlo en mejor posición para encarar las elecciones de noviembre de este año.
Esta será una plausible hipótesis para explicar el inmoral y sangriento atentado que acabó con la vida de Qassem Soleimani, ciertamente el general más importante de Irán. EE.UU. informó oficialmente que la operación fue explícitamente ordenada por el trastornado Trump, con la cobardía que es tradicional entre los ocupantes de la Casa Blanca, aficionados a arrojar bombas a miles de kilómetros de distancia de su país y aniquilar enemigos o supuestos terroristas desde drones. Esa misma prensa se encargó de presentar a la víctima como un desalmado terrorista que merecía morir de esa manera.
- 2. Falta calificarlo de aturdido y atolondrado. Quienes le siguen juicio político al presidente de EEUU presentan sus argumentos para demostrar que el mandatario ha abusado de su poder.
Dicen tales fiscales que lo único que le ha guiado a Trump en su relación con Ucrania es su interés personal. “La conducta del presidente es mala, es ilegal, es peligrosa, y engloba los peores temores de los padres de nuestra Constitución. Esta conducta no es EEUU; ‘primero’ es ‘Donald Trump, primero”, advirtió uno de los “fiscales”, Jerrold Nadler, presidente del Comité Judicial de la Cámara Baja, ante los miembros del Senado, donde se desarrolla el proceso de destitución al gobernante.
- 3. Importantes medios de comunicación alemanes destacaron el declive político de Juan Guaidog, así como su intento por desestabilizar al país y derrocar la Revolución Bolivariana.
El diario alemán Der Freitag titula “Guaidó ha pasado de ser desafiador a ser desafiado” y se centra en las acciones realizada desde el 5 de enero de 2019, no obstante, la prensa de esa nación europea recalcó este año la pérdida de las fuerzas del diputado.
El diario alemán, además, es enfático al asegurar que los comicios parlamentarios, que deben celebrarse este año en el país; “podrían perjudicar aún más su prestigio”.
Por su parte, el diario Frankfurter Allgemeine Zeitung tituló “Guaidó no pudo cumplir con ninguna de sus promesas”, haciendo referencia a su célebre frase de “cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres” repetida incansablemente durante 11 meses desde que decidió autoproclamarse.
El diario de Fráncfort fue enfático al señalar que “Guaidó ya no tiene el poder para cambiar Venezuela, pese a que tenga el valor para intentarlo”, cita el Deutsche Welle, servicio de radiodifusión internacional de Alemania.
No es la primera vez que la prensa europea recalca la pérdida de popularidad de Guaidog, sobre todo dentro de los mismos sectores de la oposición.
En diciembre pasado, la politóloga Ana Milagros Parra señala al portal France24 que, mientras Guaidó sigue perdiendo popularidad, el presidente Maduro se afianza en el poder, a pesar de las sanciones impuestas por el gobierno de EEUU, que recrudecen el bloqueo económico, financiero y comercial contra Venezuela.
- 4. Les guste o no a algunos. Con calificativos positivos como “astuto” y “exuberante”, y reconociendo su disposición al diálogo en condiciones de respeto e igualdad con el gobierno de los Estados Unidos, el medio estadounidense The Washington Post reconoció en una entrevista exclusiva la fuerza y el liderazgo del presidente constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro.
En palabras del redactor, no del entrevistado, el medio admite claramente que Maduro “tiene el control de Venezuela”, una realidad totalmente opuesta a la que intentan vender en la opinión pública internacional otros medios cófrades a la derecha mundial y latinoamericana.
La idea incuestionable del liderazgo absoluto y oficial de Maduro se refuerza con la referencia a éste como “presidente venezolano”, mientras que, al dirigente de la derecha radical, Juan Guaidog, quien se autoproclama “presidente interino”, The Washington Post lo tilda como “líder de la oposición.
Politólogo Álex Vásquez Portilla