El Ayuntamiento de Barcelona se conjura contra las mafias del realquiler turístico
by Luis Benvenuty- Asesorará jurídicamente a los propietarios de pisos,reforzará la identificación de pisos ilegales y combatirá los anuncios de inmuebles sin permisos
El Ayuntamiento de Barcelona redoblará su lucha contra los grupos organizados que se dedican a alquilar viviendas para luego realquilarlas por días a turistas. De este modo el Consistorio de la capital catalana asesorará jurídicamente a los propietarios de inmuebles que son víctimas de estas tramas, reforzará el equipo de visualizadores dedicados a localizar los pisos turísticos ilegales de la ciudad e insistirá en que las plataformas digitales dejen de colgar anuncios de viviendas que no tienen el correspondiente permiso de las administraciones. Así lo acaban de acordar la mayor parte de las fuerzas políticas municipales.
El propio gobierno sociocomún ha prestado apoyo a esta propuesta de ERC, el principal grupo de la oposición. Únicamente se han abstenido en la votación los concejales del Barcelona pel Canvi y el PP. La teniente de alcalde de Urbanismo, la común Janet Sanz, ha reconocido que el Ayuntamiento no dispone de todas las herramientas necesarias para combatir este fenómeno y urgió a que todas las administraciones actúen al unísono contra estas prácticas.
“Nunca hemos bajado la guardia -ha manifestado Sanz-, pero lo que está pasando nos muestra que tenemos que ser mucho más ágiles. “En nuestra ciudad hay multiinfractores, redes organizadas que hacen prácticas mafiosas, echan a la gente de sus viviendas, que convierten en pisos turísticos; sabemos quiénes son y sus nombres. Necesitamos más herramientas para combatirlos”.
La propuesta aprobada, además abogar por el establecimiento de un servicio de asistencia legal a los propietarios y vecinos afectados por estas prácticas ilegales y garantizar que la vigilancia que actualmente prestan los visualizadores (pendientes de una nueva contrata municipal) no sufrirán ninguna discontinuidad y que, además, se reforzará en la medida que lo permitan los recursos generados por el recargo de la tasa turística, pondrá en marcha una campaña publicitaria internacional que incida en que los potenciales clientes, si alquilan una vivienda sin el correspondiente número de registro turístico, pueden encontrarse con que no podrán acceder a ella. Este último punto es el que ha suscitado las abstenciones de PP y Barcelona pel Canvi.