Díaz-Canel con empresarios argentinos: Encuentro sincero y lleno de propósitos

El primer día de la agenda del Presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en Argentina, amaneció con un intercambio entre el mandatario y la delegación que le acompaña, y empresarios del país sureño

BUENOS AIRES.-Aunque la agenda que desarrollará aquí el Presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez —como parte de la toma de posesión del nuevo gobierno—, comenzó bien temprano este lunes, para los reporteros que cubren estas horas, los detalles de valor noticioso se dieron desde mucho antes.

El Jefe de Estado, al llegar en la tarde del pasado domingo a esta hermosa ciudad, había tuiteado rato después: «Ya llegamos a la amada Argentina, primera Patria del Che, para asistir a la toma de posesión de Alberto y Cristina Fernández». Era un mensaje en el cual él abogaba, además, por «Latinoamérica unida».

El lunes, casi amaneciendo, abrió con un desayuno de trabajo que sirvió de oportunidad para el encuentro del mandatario del país caribeño con casi 50 empresarios argentinos que en todos estos años han sostenido vínculos con Cuba.

Aunque somos nosotros los que hemos llegados a este país —expresó Díaz-Canel Bermúdez a los empresarios—, para nosotros es un placer darles la bienvenida.

De oportuno e importante calificó el encuentro que, según dijo, tiene mucho que ver con las expectativas, «con nuestros intereses en fortalecer las relaciones económico comerciales con Argentina, en particular con su empresariado, y también las relaciones de cooperación».

Es un encuentro que tiene mucho que ver —dijo además el mandatario— «con el momento que se vive en América Latina, con el momento que estamos viviendo en Cuba, y también con todo lo que nos favorece con la llegada al gobierno de Alberto Fernández, y de Cristina Fernández como presidente y vicepresidenta, respectivamente, de Argentina».

El dignatario extendió un gesto de «agradecimiento al empresariado argentino, por su respaldo y constancia», por sostener relaciones comerciales, y por el interés de hacer negocios con Cuba a pesar del bloqueo económico, comercial y financiero de los Estados Unidos, recrudecido en los tiempos recientes.

Díaz-Canel recordó que los gendarmes imperiales han activado el Título III de la Ley Helms-Burton, y añadió que «ya estamos acostumbrados, los cubanos, a que todas las semanas la actual administración del gobierno de los Estados Unidos anuncie una sanción o una nueva amenaza contra nuestro país».

Ha sido muy significativo, denunció, «todo el empeño que tiene ese gobierno imperial por evitar que llegue una gota de combustible a Cuba; y como ustedes conocen, todo el propósito que ellos favorecen es el de tratarnos de asfixiar económicamente para derrumbar la Revolución cubana».

Los cubanos estamos acostumbrados a eso y en nuestra historia hay toda una tradición de resistencia, de lucha, y de emancipación, resaltó el Jefe de Estado: «nosotros no vamos a renunciar a esos ideales, nosotros no reconocemos ninguno de los acápites de la Ley Helms-Burton ni de esta política del gobierno de los Estados Unidos, nosotros protegemos al empresariado extranjero que participa con negocios en Cuba».

Las misiones empresariales, destacó, se han incrementado en ambas direcciones, ejemplo de ello son la realización en La Habana, en octubre de 2018, del evento «Sabores y negocios argentinos», que se reeditará en mayo del 2020, y el encuentro «Cuba en Argentina» celebrado en el 2018 y en septiembre del 2019. «A ello se suma la sistemática participación del empresariado argentino y de muchos de ustedes en las ediciones de la Feria Internacional de La Habana; en la última edición, pasada, participaron más de 14 empresas argentinas».

Como un propósito importante el mandatario mencionó el de lograr una mayor presencia de los productos cubanos en Argentina. Y al referirse a la trascendencia del Convenio de Fideicomiso que hace posible mantener las relaciones comerciales entre ambos países sin necesidad de transferencias bancarias, comentó que el mismo —que permite la venta de bienes y servicios en el sector de la Salud, y de productos de la biotecnología cubana y la adquisición de alimentos para Cuba— tiene una baja ejecución, lo cual es señal de que debe ser mejor aprovechado. En tal sentido argumentó que se debe trabajar en función de incrementar las exportaciones cubanas.

En materia de cooperación, según enumeró el Presidente, se han concretado varios proyectos apoyados por el fondo argentino para la cooperación Sur-Sur. En estos momentos, dijo, existen once proyectos a desarrollar entre los dos países amigos. Igualmente hizo alusión a intereses comerciales identificados, y a la inversión extranjera en Cuba como un componente esencial del plan de desarrollo económico y social del país caribeño con vistas al 2030.

«La importancia de la participación del empresariado argentino en el desarrollo de la agroindustria, la manufactura, la industria alimentaria, y el aprovechamiento de la energía renovable, en lo cual tienen tanta experiencia, es particularmente importante para nosotros», dijo el Jefe de Estado a sus interlocutores.

«La oportunidad que ofrece Cuba por su posición geográfica en el mar Caribe para que el empresariado argentino pueda acercar sus intereses, ampliar el comercio y otros negocios con la región caribeña —con la cual tienen estrechos nexos y un acuerdo de comercio y de cooperación económica—, es también algo que podemos trabajar de manera conjunta», afirmó Díaz-Canel Bermúdez. Y destacó su certeza de que «con la asunción del nuevo gobierno, consideramos que podemos trabajar más estrechamente para relanzar y potenciar las relaciones económicas bilaterales».

El Presidente enfatizó: «con los lazos históricos, culturales, de amistad y de hermandad que nos unen, un encuentro como este no puede ser solo un encuentro para negocios ni un encuentro de temas empresariales. Nosotros queremos expresarles a todos ustedes que Argentina es para Cuba un país entrañable, es un país querido, y contamos también entonces, en base a esa relación, con que el empresariado argentino y el empresariado cubano puedan ampliar sus relaciones».

Foto tomada del perfil de Facebook de Presidencia Cuba.

Seguidamente, en voz de los empresarios argentinos, se escuchó la voluntad de ofrecer todo lo que sea necesario para que los productos argentinos tengan presencia en Cuba. Entre todos recordaron que el país sureño ha tenido momentos duros, los cuales golpearon a las pequeñas y medianas empresas, pero esa realidad no va impedir, dijeron, que los empresarios argentinos puedan tener un pie en el país caribeño al tiempo de hacer mucho por mejorar la economía propia.

Había un ambiente en el encuentro, de una esperanza que nace de la llegada del nuevo gobierno en Argentina. Se habló de fortalecer la producción nacional, y de defender con fuerza esas pequeñas y medianas empresas tan golpeadas por las oleadas del neoliberalismo.

La gratitud en ambas direcciones también puso el tono a esa jornada en la que los empresarios hablaron de transmitir conocimientos disponibles para que Cuba pueda producir más alimentos, desarrollar proyectos agroalimentarios o relacionados con biocombustibles, para que sea posible acrecentar la fluidez en el transporte aéreo y seguir dando pasos en el turismo.

Un empresario de experiencia habló de la seriedad y la honestidad con que los cubanos han emprendido los proyectos conjuntos, y fue más explícito al decir que él, cuando ha negociado con Cuba, ha sentido como si negociase consigo mismo.

Al final del encuentro, Díaz-Canel dijo a los presentes: «Nos sentimos emocionados, comprometidos con muchas visiones de lo que podemos hacer en el futuro; estamos hablando con empresarios, pero más que eso, con seres humanos de una calidad tremenda».

Como gesto de cierre, el mandatario pidió poder estrechar la mano a cada asistente, y dejar constancia fotográfica de tal cercanía.

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