Hacienda coge al triunfador de San Isidro: el torero Ferrera pierde un pleito contra el fisco

Antonio Ferrera se une a la lista de famosos que pierden por usar sociedades para tributar. El TSJ extremeño da la razón al fisco. En primavera, fue rescatado tras saltar de un puente

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El torero Antonio Ferrera, premiado por la mejor faena en la pasada feria de San Isidro, ha sufrido la cogida de Hacienda. La Agencia Tributaria lo sancionó con 333.885 euros por usar una sociedad para pagar menos impuestos y la justicia ha dado la razón al fisco. Los problemas con Hacienda, que también ha acusado de delito al diestro Miguel Ángel Perera, llegaron en mal momento para Ferrera. En mayo, semanas antes de triunfar en Madrid, se precipitó desde un puente al Guadiana.

El uso de sociedades para pagar menos en el impuesto sobre la renta se ha vuelto contra tertulianos, presentadores de radio y televisión, actores, abogados, deportistas, médicos... pero también toreros. Antonio Ferrera, por ejemplo, fue sancionado el pasado mes de enero por el Tribunal Económico Administrativo de Extremadura por usar su sociedad, José Antonio Ferrera Sanmarcos SL, para rebajar su factura fiscal.

El matador de toros, al que los cronistas definen como "un torrente de clarividencia y personalidad", cobró indistintamente entre 2012 y 2014 como persona física y a través de su sociedad, de la que posee el 90% de las acciones. Simplificando, al percibir ingresos como torero como persona física, estaba sometido a una tributación de alrededor del 50%, y por sociedades abonaba solo la mitad.

Según una sentencia del pasado 21 de octubre del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura, Ferrera cobraba a través de su empresa las corridas en las plazas que mejor pagaban. "Los mayores rendimientos obtenidos en las plazas más importantes, como son las de Madrid, Sevilla o Pamplona, no son declarados por la persona física y sometidos al tipo de gravamen progresivo sino que se trasladan artificiosamente a la sociedad para aplicar el tipo fijo más beneficioso del impuesto sobre sociedades".

Según la sentencia del TSJ, "resulta contrario a las reglas de la lógica que solamente se excluyan de la renta del matador en el IRPF cinco corridas de 2012, siete de 2013 y ocho de 2014, por las que se obtuvo una mayor contraprestación económica al celebrarse en las plazas de toros más importantes". La defensa de Ferrera alegó que lo hacía así porque las corridas celebradas en las plazas más grandes permiten "girar la factura por todos los gastos generados por la cuadrilla", pero el tribunal no lo acepta. "Si está dado de alta en el impuesto de actividades económicas como matador de toros, no existe motivo para dividir los ingresos de esta actividad según la plaza de toros o el ingreso percibido".

La sentencia considera evidente el artificio. "Se ha procedido a una división artificial, simulando el torero y la sociedad su realización fragmentada con la evidente finalidad de reducir la base imponible del IRPF y no aplicar el tipo marginal máximo del IRPF". La justicia acepta el uso de sociedades para facturar, pero siempre que tengan personal y actividad, como señala la sentencia. "No es objeto de discusión que la sociedad limitada pueda desarrollar una actividad autónoma y distinta de la persona física, pero ello será posible cuando realmente la actividad empresarial exista y se ejercite de forma independiente de la que realiza la persona física. En este caso, dicha independencia no se constata, al tratarse de trabajos personalísimos, idéntica actividad, similares gastos y no existir un criterio objetivo que permita dividir la actividad del matador de toros".

Los jueces consideran que Ferrera eludió el pago de 182.633 euros, pero la sanción eleva el total a pagar a 333.885 euros. Además, Ferrera tendrá que pagar las costas del procedimiento. La sentencia no es firme. La defensa del torero no devolvió el jueves el mensaje de este diario.

Ferrera, nacido en Villafranca del Guadiana (Badajoz) hace 41 años, estuvo dos años parado por una lesión sufrida en 2015. Reapareció en 2017 y desde entonces ha tenido sonados éxitos, como ser el triunfador de la Feria de Abril de ese año o ganar la mejor faena en San Isidro en 2019. Esa corrida llegó solo semanas después de que fuera rescatado en el Guadiana después de haber, presumiblemente, saltado desde un puente en Badajoz. La prensa vinculó el incidente con problemas familiares. A esos hay que sumar los de Hacienda.

Su paisano Miguel Ángel Perera lo tiene peor, porque está acusado por delito fiscal. En ese caso, Hacienda descubrió una agenda con pagos en B de las plazas de media España, lo que agravó el asunto. Los toreros han sufrido multitud de inspecciones y en el sector hablan de toreros con tantas deudas con Hacienda que prolongan sus carreras a su pesar para ponerse al día.

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