Aerolíneas
Ryanair mantiene su base en Girona tras imponer un recorte a los trabajadores
La aerolínea 'low cost' abandona su plan para dejar de prestar servicio desde la capital gerundense
"Es una tomadura de pelo", critica la portavoz del sindicato USO, sobre las condiciones laborales del pacto
by Gabriel UbietoRyanair mantedrá base de operaciones en el aeropuerto de Girona, pero a costa de reducir su plantilla y las condiciones de la misma. La compañía ha cerrado una reestructuración a la que individualmente se han acogido parte de los 160 trabajadores con base en Girona, entre pilotos y tripulantes de cabina; tal como han confirmado fuentes del sindicato USO. La aerolínea 'low cost' ha dado un vuelco a las negociaciones que desde hace meses mantenía con las centrales y que tenía el cierre de la base de Girona como uno de los elementos sobre la mesa. Finalmente, Ryanair no cerrará su base en Girona, aunque mantiene su intención de clausurar las que mantiene en Tenerife, Lanzarote y Gran Canaria a partir del 8 de enero.
Fuentes de USO han explicado que la empresa puenteó la negociación colectiva con las centrales y ofreció a la plantilla, que tenía margen para decidir hasta el pasado viernes 6 de diciembre, acogerse individualmente a su oferta para la continuidad de la base. Esta consiste en convertir a los trabajadores de fijos a fijos discontinuos, lo que se traduce en que tendrán contrato nueve meses al año y pasarán al paro los tres restantes. "Es una tomadura de pelo", ha declarado la portavoz de USO Lidia Arasanz. Desde la central, a la que primeramente se les ofreció acogerse a dicho pacto y que rechazaron, han avanzado que impugnarán el acuerdo. Pues consideran que incluye claúsulas ilegales. Según la versión sindical, los tripulantes de cabina que se acojan al acuerdo perderán su categoría profesional y pasarán a ser considerados agentes de servicio al público; lo que tiene un impacto directo en los pluses salariales.
Aquellos trabajadores que decidan no acogerse voluntariamente al pliego de condiciones ofertado por la compañía serán despedidos en el marco del expediente de regulación de empleo (ERE), presentado en octubre por Ryanair. El pasado 23 de agosto la aerolínea comunicó vía correo electrónico a los tripulantes de cabina y pilotos que mantenía en las cuatro bases Girona e Islas Canarias, aunque no fue hasta principios de octubre cuando formalizó la mesa negociadora del ERE, para la clausura de las bases y el despido de más de 500 trabajadores. Este, ya cerrado sin acuerdo con los sindicatos, se hará efectivo el próximo 8 de enero.
Mediación de la Generalitat
El Departament de Territori ha sido uno de los actores que ha seguido de cerca los planes de Ryanair sobre si abandonaría o no su base de Girona. Hasta el punto de que una delegación se desplazó hasta Dublin para negociar con la dirección de la aerolínea. Su papel en toda esta trama, según defiende el secretario d'Infraestructures i Mobilitat, Isidre Gavin, ha sido como mediador entre la compañía y el Gobierno central. "Tenemos constancia de que el Ministerio [de Fomento] se ha comprometido con Ryanair a bajar las tasas aeroportuarias de Girona",afirma Gavin.
Esa promesa de bajada de tasas es un elemento mediante el que la aerolínea podría recortar costes, que se sumará al recorte de costes laborales tras las nuevas condiciones de los tripulantes y pilotos. Otra variable en las negociaciones son las transferencias que se realizan anualmente desde la Generalitat y otras entidades públicas para apoyar a Ryanair en la promoción turística de la zona de Girona. Desde el 2003, según fuentes de Territori, la aerolínea irlandesa se ha embolsado 60 millones de euros en estos conceptos y tiene asegurado un año más de ayudas.
Desde Territori defienden que el año que viene replantearán la concensión de dichas ayudas a la promoción turísticas, debido a la vigilancia europea en defensa de la libre compentencia. El objetivo de Territori es reconvertirlas a modelos de libre concurrencia, no a través de pactos individuales con las compañías, y la cuantía a otorgar desde el erario público "dificilmente aumentará", según Gavin.