El plan demócrata para captar un millón de votos latinos en estados estratégicos en 2020
El Progressive Turnout Project invertirá $45 millones de dólares en promover el sufragio
by Jesús GarcíaFlorida, Michigan, Pensilvania y Wisconsin son estados clave para los demócratas en la elección presidencial del 2020, por ello reconocen la necesidad de captar el mayor número de votos posibles, especialmente de comunidades afines al partido que no confían en el sufragio, como los latinos, a través de una de las estrategias más viejas en campañas electorales: las giras a pie de tierra.
No serán los aspirantes a puestos del Senado o presidenciales quienes necesariamente realicen la petición de boca en boca, sino a través de una red de 1,100 Representes Comunitarios, quienes tendrán como objetivo atraer 4.8 millones de votantes que no acudieron a las urnas en 2016, de los cuales un millón son latinos jóvenes, entre los 18 y 35 años.
Los recorridos buscan cubrir 7.1 millones de viviendas en 16 entidades, incluidas las mencionadas y Arizona, Colorado, Georgia, Iowa, Maine, Carolina del Norte, Alabama, Iowa, Kansas , Kentucky, Nebraska y New Hampshire.
“Esta comunidad está creciendo rápidamente y es un grupo de gente que tiene mucho valor y mucho amor por este país”, señaló Johnny Acevedo, responsable de la red enfocada a los hispanos. “Hay mucha gente del Partido Republicano que no le conviene que esta comunidad vote, porque cuando los latinos votan, nosotros ganamos (los demócratas) y por eso están haciendo lo posible para negarles ese derechos”.
Afirmó en entrevista con este diario que la comunida ha sido objeto de ataques desde la campaña de 2016 por el presidente Donald Trump, a pesar de que es “un grupo social que ayuda a este país”.
Cuestionado sobre la selección de estados donde se hará la campaña, en la que se invertirán $45 millones de dólares y comenzará a operar en mayo de 2020, Acevedo reconoció que Florida, Michigan, Pensilvania y Wisconsin serán decisivos para la Presidencia.
Los otros 12 son, además, importantes para la votación del Senado. “Esta selección de estados fue porque son los que serán más competitivos”, apuntó. “También iremos a esos estados, como Nebraska, para intentar ampliar la brecha en la presidencial”.
Acevedo reconoce que es difícil abordar a la comunidad latina en los EEUU, porque es un grupo social integrado por “varios grupos”, es decir, no hay diversidad de culturas como la mexicana, la cubana, venezolana, puertorriqueña, colombiana.
El idioma no es suficiente elemento de unidad, ¿cómo abordarán esas diferencias?, se le cuestionó.
“En efecto, la demografía de latinos en Florida es completamente diferente en Colorado, Texas, Michigan”, señala. “En los programas de capacitación vamos a entrenar al personal comunitario a que aprendan las diferentes culturas de los hispanohablantes… no puedes asumir que hablar español y te importan las mismas cosas”.
El caso de Florida
En el caso de Florida, donde entre el 50-54 por ciento votó por el presidente Trump, la estrategia se enfoca a grupos de “no blancos”, ya que son los votantes que sienten que sus voces no han sido escuchadas.
“Les haremos ver que su voto cuenta y es importante”, aseguró sobre la campaña del Comité de Acción Política Progresista del Progressive Turnout Project (PTP), responsable del “Programa Comunitario Político”.
El plan arrancará con 66 oficinas locales y 1,100 Representantes Comunitarios, 96 de los cuales se ubicarán en Florida, una entidad estratégica para el voto hispano.
“El camino de los demócratas hacia la victoria pasa por animar a votantes demócratas que no votan frecuentemente a presentarse a votar y expandir nuestra base de apoyo”, dijo Alex Morgan, director ejecutivo de PTP. “No podemos contar con que el ánimo que vimos en 2018 se repita en 2020 a menos que comencemos a conversar con votantes ahora mismo”.
La capacitación comenzará en febrero y las primeras oficinas locales se abrirán en la primavera, para iniciar la acción a pie de calle en mayo.
“Nosotros no gastamos dinero en costosos anuncios de televisión, campañas de correo directo”, dijo Morgan. “Nos
concentramos en lo que verdaderamente funciona: varias conversaciones en persona con votantes quienes están desilusionados con la misma política de siempre”.
Reconoció que los demócratas “no han hecho un buen trabajo conversando con votantes de manera auténtica”, lo que ha impactado negativamente en la cercanía que los votantes siente hacia el partido.
El PTP utiliza varios análisis predictivos para identificar altas concentraciones de votantes demócratas que ejercen ese derecho con frecuencia, calculando el historial de participación electoral, información demográfica y los datos de consumidores para identificar la probabilidad de que un votante vote por los demócratas.
El 51.4% de votantes a nivel nacional –quienes son el enfoque de este proyecto– se identifica como gente de color, o sea gente no blanca; 47.1% son menores de 35 años de edad y 54.4% son mujeres.
“Los demócratas ganan cuando nos presentamos a votar”, dijo Morgan. “La demografía ha estado cambiando a favor de los demócratas por un rato, pero las elecciones de 2016 demostraron que no podemos contar solamente con el aumento del electorado para ganar”.
De ser efectiva esta campaña lograría captar al menos 6.2 millones de votos más, incluyendo el millón de latinos, quienes afirman que no votan porque creen el sufragio que emiten no cuenta.
“Ellos a veces piensan que su voto no importa o no cuenta, debido a cualquier razón, dependiendo del estado donde vive, se le hace más difícil salir a votar”, reconoce Acevedo. “Están desilucionados porque no tienen la representación en cuanto a candidatos”. El objetivo es darle un giro a esa visión.
Se estima que en 2020, al menos 32 millones de hispanos serán elegibles para votar, de los cuales entre 15 y 18 millones son latinx, es decir, ciudadanos de entre 18 y 35 años de edad.