Abusos en la Iglesia: Inician primer juicio contra ex canciller del Arzobispado de Santiago
El ex canciller del Arzobispado de Santiago Óscar Muñoz Toledo, es acusado por presunto abuso sexual reiterado y violación a menores, por lo que el Ministerio Público solicita 41 años de presidio efectivo.
Para la mañana de este lunes está fijado el inicio del juicio oral en contra del ex canciller del Arzobispado de Santiago Óscar Muñoz Toledo, quien enfrentará el proceso judicial como parte de las denuncias por abuso sexual en la Iglesia Católica.
Se trata del primer proceso de este tipo, luego de que en mayo de 2018 se iniciaran las investigaciones con respecto a los presuntos abusos sexuales de decenas de sacerdotes.
En específico, Muñoz es acusado por presunto abuso sexual reiterado y violación a menores, por lo que el Ministerio Público solicita 41 años de presidio efectivo.
El religioso actualmente se encuentra con arresto domiciliario nocturno en la casa de su madre en la comuna de Macul.
En tanto, en noviembre pasado el papa Francisco le notificó que se le quitó el estado clerical “ex officio et pro bono Ecclesiae” por los delitos señalados.
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El juicio, que se estima que podría extenderse por un mes, será liderado por el fiscal Centro Norte, Francisco Jacir, quien tomará declaración a 47 testigos, entre ellos, presuntas víctimas y religiosos.
El abogado del religioso, Gabriel Henríquez, señaló a Radio Cooperativa que “esperamos y confiamos que lo que podamos hacer en este juicio oral nos permita arribar a la sentencia que esperamos. Si no es la absolución, evidentemente vamos a tratar de obtener la menor pena posible“.
En tanto, Josefina Gutiérrez, abogada de la Fundación Para la Confianza y representante de dos de las cuatro víctimas, indicó que “va a ser un juicio largo porque hay harta prueba que rendir, pero estamos tranquilos esperando que empiece”.
Además, detalló que el acusado tenía “una conducta súper grave porque él recibía a personas víctimas de abuso sexual mientras que, como probaremos en el juicio, abusaba al mismo tiempo de otras personas. Entonces, es una situación hiperrevictimizante, vulneratoria, y agrava, en el fondo, las cosas”.
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