Investigación
Un nuevo estudio vincula la desaparición de los neandertales con la endogamia
by David Ruiz Marull- La población de esta especie era tan reducida que aumentaban las dificultades para encontrar pareja y la dejaba más expuesta a fluctuaciones de mortalidad y reproducción
Los científicos siguen desconcertados por la repentina extinción de los neandertales, hace unos 40.000 años. Hace apenas unas semanas, investigadores de la Universidad de Stanford apuntaron que esta especie había desaparecido por culpa de las enfermedades propagadas por los Homo Sapiens . Ahora, integrantes de la Universidad Tecnológica de Eindhoven (TU/e) sugieren que quizás fuimos muy rápido en asumir esa hipótesis.
Según su trabajo, basado en modelos de la biología de la conservación, la extinción de los neandertales puede haber sido el resultado de su pequeño tamaño de población, según detallan en el estudio publicado en la revista PLOS ONE . Parece evidente que esta explicación no entra directamente en contradicción con la realizada desde Stanford.
Choque de especies
Hay un amplio consenso sobre el papel que jugaron los humanos modernos en el final de los neandertales
Hay un amplio consenso entre los especialistas sobre el hecho de que los humanos modernos jugaron un papel muy importante en el final de los neandertales. Las migraciones de los Homo Sapiens de África hace unos 60.000 años provocaron la invasión de territorios de Europa y Oriente Próximo, zonas originalmente dominadas por nuestros corpulentos primos de gruesas cejas.
Las tensiones biológicas se agravaron cuando los sapiens superaron en número a sus especies hermanas. Los científicos holandeses entienden, sin embargo, que vincular la desaparición de los neandertales con las invasiones de los humanos modernos puede haber sido demasiado precipitado.
Sus análisis partieron de un hecho incontestable: la población de neandertales, como cualquier otro grupo de homínidos anteriores, era extremadamente pequeña y comprendía entre apenas 10.000 y 70.000 individuos. Así había sido durante toda su existencia. Los investigadores se preguntaron entonces si este solo hecho podría explicar su extinción.
Para ello, utilizaron un conjunto de modelos matemáticos e informáticos de biología de la conservación (que estudia las causas de la pérdida de diversidad biológica y cómo minimizar este efecto) para representar a las poblaciones de neandertales. Luego sometieron el grupo a tres procesos a los que las poblaciones pequeñas son particularmente vulnerables: las dificultades para encontrar pareja (efecto Allee), la endogamia y las fluctuaciones aleatorias (en mortalidad y reproducción).
Los neandertales eran entre 10.000 y 70.000 individuos
Las poblaciones pequeñas son vulnerables al afecto Allee, la endogamia y las fluctuaciones de mortalidad y reproducción
Para su sorpresa, los autores del estudio descubrieron que incluso si los neandertales hubieran sido completamente idénticos a los humanos modernos, enfrentarían, con el tiempo, un riesgo considerable de extinción por culpa, simplemente, de su pequeño tamaño de población. ”Ninguna invasión de otra especie era necesaria para que desaparecieran de la faz de la tierra”, escriben.
La “mala suerte” de vivir en pequeñas comunidades habría sido, según los investigadores de la TU/e, suficiente para acabar con los desafortunados neandertales 400.000 años después de su aparición, según explica en un comunicado Krist Vaesen, una de las autores principales de este estudio.
Especie desafortunada
La “mala suerte” sería suficiente para acabar con los neandertales 400.000 años después de su aparición
“Las poblaciones pequeñas pueden sobrevivir durante largos períodos de tiempo, y luego desaparecen repentinamente debido a fluctuaciones aleatorias en nacimientos, muertes, proporción de sexos y presiones ambientales”, aclara. Siguiendo esta hipótesis, los Homo Sapiens no habrían tenido una incidencia directa en la extinción de los neandertales, aunque sí podrían haber “acelerado el proceso de declive”.
El escenario plausible que proponen los científicos holandeses podría ser uno en el que los humanos modernos hubieran mantenido “una coexistencia pacífica con la otra especie, aunque su mera presencia redujo las oportunidades para que los neandertales encontraran parejas e incluso pudieran emigrar”.