Así nació el FC Barcelona

Un anuncio en Los Deportes fue el romántico origen del FC Barcelona
Gamper fundó en el Gimnasio Solé un club que tras 120 años mantiene su sello

De las escenas más modestas a veces surgen ideas universales. De la manzana de Isaac Newton nació la ley de la gravedad y en un garaje Steve Jobs maquinó Apple. La ‘manzana’ que dio origen al FC Barcelona cayó en la cabeza de Hans Gamper (1877-1930), un joven suizo recién llegado a Barcelona en 1898 por motivos profesionales que echaba de menos jugar al fútbol. Además de un apasionado de otros deportes como el atletismo, el ciclismo, el golf o el rugby, Gamper tenía ya un completo currículum practicando ese juego británico que consistía en patear un balón y que había aterrizado en Catalunya de una manera muy informal hacia 1890 a través de trabajadores británicos del sector textil catalán.

La organización que le había permitido jugar en equipos constituidos con cara y ojos como FC Basilea, FC Excelsior, FC Zürich o FC Lyon no la encontró inicialmente en Barcelona. Como embrión del FC Barcelona, aunque sin llegar a constituirse en entidad deportiva, un grupo de amigos formaron la ‘Sociedad de Football de Barcelona’, que jugó partidos entre 1894 y 1896. Entre ellos estaban los hermanos Parsons y los Morris, posteriormente jugadores del Barça. Junto a un grupo de jóvenes, extranjeros y catalanes que vivían en Barcelona, emprendieron una aventura inicialmente humilde que 120 años después aún perdura como una institución de alcance ecuménico. El 22 de octubre de 1899 Gamper publica un anuncio en la revista Los Deportes para hacer un llamamiento a todos los aficionados al ‘foot-ball’. Al fin, el 29 de noviembre Gamper y los suizos Otto Kunzle y Walter Wild, los ingleses John y William Parsons, el alemán Otto Maier y los catalanes Lluís d’Ossó, Bartomeu Terrades, Enrique Ducay, Pere Cabot, Carles Pujol y Josep Llobet se citan en el Gimnàs Solé para fundar una asociación que llevará el nombre y el escudo de la ciudad: el FC Barcelona. El 8 de diciembre juegan el primer partido contra la Colonia Inglesa, que gana 0-1 a un equipo formado por diez jugadores: Urruela, Wild, Lomb, D'Ossó, Llobet, López, Terradas, Gamper como capitán, Kunzle y Schilling.

En el Gimnasio Solé, sede social de Los Deportes, el 13 de diciembre otra reunión determina que los colores azul oscuro y el granate sean los que distingan a la nueva entidad.

Desde sus albores, Gamper dotó al club de muchos de los signos que le han acompañado y definido durante el siglo posterior: una sociedad democrática, en la que el poder recayera en sus socios, y a partir de 1908, “un compromiso con la catalanidad”, como recoge hoy el club en su web oficial. El protagonismo de Gamper no evitó que el primer presidente del Barça fuera el también suizo Walter Wild, amigo de Gamper, monitor de gimnasia en la Sociedad Suiza y miembro de la Iglesia Evangélica. Posteriormente, Gamper fue presidente hasta en cinco ocasiones.

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Inicialmente, el club usó el mismo escudo que la ciudad de Barcelona hasta que en 1910 apostó por su propio símbolo, que con sus remodelaciones llega hasta nuestros días con un aspecto muy similar. Una de las teorías que se apunta fue que Lluís d’Ossó exclamó en una reunión: “Això és una olla!” (“¡Esto es una olla!”) y a Gamper le dio por dibujarla. En el escudo ya apareció la Creu de Sant Jordi, la ‘senyera’, cuatro franjas verticales azules y tres granas y las siglas FCB.

En primera instancia media camiseta era azul y la otra media, grana, con los pantalones blancos, hasta que en 1910 llegaron las franjas verticales. Las teorías son varias: se adoptaban los colores del Basilea, uno de los clubs de Gamper, o el azul y grana de la indumentaria del equipo de rugby de la escuela inglesa Merchant Taylors’, donde los hermanos Witty habían estudiado. El primer campo donde jugó el Barça fue el antiguo Velòdrom de la Bonanova.

Fueron los primeros pasos del club, el sueño de unos románticos que hoy, 120 años después, se frotarían los ojos al ver cómo ha crecido su juguete.