Análisis de Lost Ember – Xbox One
by Carlos GallegoTítulo | Lost Ember |
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Autor | Carlos Gallego |
Tamaño | 7,9 GB |
Fecha de Lanzamiento | 22/11/2019 |
Desarrollador | Mooneye Studios |
Publicado Por | Mooneye Studios |
Género | Walking Simulator |
Descripción del Juego | Un mundo de increíble belleza esconde los secretos de un pasado que tu compañero y tú tendréis que descubrir. Juega como cualquiera de los animales que encuentres para ver el mundo desde nuevas perspectivas y persigue tu destino en la aventura de exploración de Lost Ember. Con un lobo como personaje principal y un compañero muy decidido siempre a tu lado, descubrirás una historia de lealtad, desesperanza y traición que condujo a la caída de todo un mundo. Tu compañero espiritual, que antaño fue parte de una antigua civilización, te guía ahora a través de un mundo reclamado por la naturaleza. Juntos hallaréis recuerdos de tu vida pasada esparcidos por el mundo, los cuales os ayudarán a entender qué os ocurrió a tu compañero y a ti. Tu habilidad para poseer a cualquier animal del mundo te permite explorarlo a través de diferentes perspectivas, gracias a las cuales podrás encontrar secretos ocultos y descubrir lugares que fueron cruciales en la caída de la civilización y albergan recuerdos importantes. |
Comprar | https://www.microsoft.com/es-es/p/lost-ember/9pn11w6w1lq1?activetab=pivot:overviewtab |
Los quizás mal llamados walking simulators han vivido en esta octava generación de consolas su estallido y declive particulares. Con obras como What Remains of Edith Finch, Firewatch o Tacoma a mitad de la generación abanderando el sello de calidad de esta manera de contar historias a través de un videojuego. Esto no ha sido algo que haya pasado desapercibido a los desarrolladores de estudios noveles o independientes, que han visto en estas experiencias una buena forma de traer a la vida algunas de sus ideas. Ese es el caso de Lost Ember, un juego desarrollado por el estudio alemán Mooneye gracias a una exitosa campaña en Kickstarter, que nos ha llegado este 22 de noviembre a Xbox One, PC, PlayStation 4 y Nintendo Switch.
En este título vamos a conocer la historia de Kalani en su camino a la Ciudad de la Luz, lugar al que van las almas que han sido bondadosas en vida tras su muerte. Sin embargo, por algún motivo que desconocemos este no ha sido nuestro caso. Nuestro acceso al paraíso de nuestra tribu nos ha sido negado y con nosotros tenemos a otro espíritu perdido que ha quedado varado en el mundo de los vivos y que se manifiesta en forma de mota de luz brillante, o como el propio título del juego indica, en forma de ascua perdida.
Como he mencionado, Lost Ember es un simulador de paseos, pero tiene sus propias particularidades, centradas en que podremos ir tomando la forma de distintos animales a lo largo de nuestra aventura para poder ir avanzando. Esto está bien justificado por el título ya que, aquellas almas a las que el acceso a la Ciudad de la Luz les ha sido prohibido, están condenadas a vagar por el mundo en forma de animal hasta el fin de los días.
En nuestro caso adoptamos la forma primigenia de una loba, esta forma es la que nuestro cuerpo obtendrá de forma recurrente durante la aventura, pero la magia en este juego es ir tomando la forma de los distintos animales que el juego nos presenta durante nuestro periplo. Con solo pulsar un botón nos podremos transformar en cualquier animal que haya en pantalla a una distancia relativamente cercana a nosotros.
Desde pequeñas aves, pasando por peces hasta enorme elefantes o cabras montesas el juego nos da la oportunidad en convertirnos en un número más que considerable de animales a lo largo de sus siete capítulos. En ocasiones, cambiar de piel podrá hacerse por mero placer o para explorar los escenarios del título que son, por lo general, bastante extensos. Pero en otros momentos el juego nos pondrá el único desafío que vamos a ir encontrando en él al tener que buscar el animal apropiado con el que accedes a la siguiente zona, ya que sin ser ni mucho menos un puzle, pasar por debajo de una pared de piedra, solo va a ser posible, por ejemplo, si entramos en el cuerpo de un topo. Con este ejemplo doy una idea del tipo de desafío que tiene el título mientras exploramos y buscamos las formas de avanzar en el escenario.
Precisamente sobre la exploración, he de mencionar que el título cuenta con unos escenarios muy bien trabajados, con distintos niveles y relieves, plagados de rincones en los que encontrar sus 236 coleccionables. Sin embargo, estos coleccionables son la única excusa que vamos a encontrar para desviarnos de nuestro objetivo principal y, desafortunadamente, se sienten como algo desfasado, perteneciente a otro tiempo dentro de los videojuegos. Estos coleccionables que no aportan absolutamente nada, entre los que se nos presentan encontramos distintos tipos de setas que podremos ir descubriendo, distintas reliquias que pertenecieron a las tribus que allí vivieron y que nos dan una breve descripción del uso del objeto y una idea de como vivían los antiguos moradores de esta civilización ahora perdida y los propios animales. Con diecisiete especies distintas a las que poseer y seis animales legendarios que encontrar que solo se distinguen de los comunes por su color brillante, estos coleccionables son un punto muy opcional dentro Lost Ember.
Al final, lo poco estimulante de la exploración, dejando de lado el recrearnos en los escenarios, hace que nuestros motivos para avanzar se concentren meramente en la historia. A lo largo de los distintos escenarios iremos encontrando hogueras que servirán como activadores para nuestros recuerdos, de esta forma, y a través de imágenes estáticas superpuestas en el escenario el juego nos relata nuestra historia y por qué el acceso a la Ciudad de la Luz nos ha sido esquivo. Precisamente esta historia es el punto más fuerte del juego, la condición humana, la empatía, el entendimiento, el egoísmo, la esclavitud, el amor y otros tantos temas pasan por nuestra pantalla para quedarse con nosotros a través de la trágica historia de Kalani.
Para encontrar estas hogueras contamos con la posibilidad de olfatear en busca de nuevos recuerdos o ver de un vistazo rápido que especies tenemos alrededor que puedan ser poseídas. Además, y para acabar con la jugabilidad, Lost Ember nos da la posibilidad de realizar acciones totalmente irrelevantes con cada animal que poseamos como echarnos agua por la espalda, comer o tumbarnos en el suelo. Lo cierto es que esta curiosidad me sirve para incidir sobre el mimo que se ha puesto por parte de Mooneye en el manejo de cada uno de los animales que podemos poseer, cada uno distinto, con sus propias habilidades y formas de moverse se sienten pulidos y no tardas más de diez segundos en sentirte cómodo con cada uno de ellos, siendo controlados, de formas completamente distintas entre sí.
En cuanto a su apartado artístico Lost Ember hace gala de una variada paleta de colores, con colores vivos que entran por los ojos y cautivan desde su primer momento. Sencillo en sus formas y con un estilo cel shading que le sienta de maravilla, el juego rinde bien en Xbox One S. Sin embargo, podremos encontrar que en espacios más cerrados la cámara tiene algún problema a la hora de darnos una correcta orientación de donde estamos.
Las composiciones del título son meramente ambientales y acompañan al juego en los momentos más enfáticos, ninguna de ellas será recordada fuera de este título, pero no desmerecen el trabajo hecho. El juego llega con voces en inglés y subtítulos y textos en pantalla en castellano. Como pega, diré que algunos de los textos de la interfaz no están correctamente traducidos, concretamente usando el verbo “coger” en lugar de “pulsar” o “mantener”, un fallo que no lastra, pero llama la atención.
En definitiva, Lost Ember es el enésimo walking simulator que ve la luz en esta generación. Aprovechándose del auge del género, nos aporta la transmutación entre animales como un nuevo añadido y adquiere así su propio carácter. Con una duración que no pasará de las 4 horas, si seguimos su trama sin entretenernos demasiado a recoger coleccionables, su longevidad se percibe como correcta, dentro de los estándares de su género. Sin embargo, a pesar de su historia que, quizás sea lo único que pueda quedarse como poso en el jugador después de acabar la aventura, no veo motivos por los que nadie debiera de priorizar este juego por delante, no solo de los que hay en el mercado, sino de otras obras inherentes a su género.
➕ Lo Bueno
- Su historia
- La variedad de animales y lo bien implementado que es está su manejo
- Visualmente encantador
➖ Lo Malo
- Coleccionables vacíos
- Invita poco a explorar
Nota
Jugabilidad: 8.0
Gráficos: 7.0
Apartado técnico: 7.0
Guion: 7.0
Cámara: 6.0
Nota Final: 7.0
Resumen
Lost Ember es el último juego del estudio alemán Mooneye. Este walking simulator nos da a conocer la historia de Kalani en su periplo hacia la Ciudad de la Luz en el que conoceremos de primera mano los acontecimientos que nos han llevado hasta aquí. Tomando la forma de distintos animales para seguir avanzando en la aventura, Lost Ember nos invita a pesarnos en sus vivos y variados escenarios mientras descubrimos su trágica historia.