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El Eco

El IPAT y el Conservatorio esperan que en 2020 se priorice la construcción del edificio propio

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El lema “Por un edificio digno” que estructuró los reclamos sobre la infraestructura escolar en el último año por parte de las comunidades del IPAT (Instituto del Profesorado en Arte de Tandil “Escultor Carlos Allende”) y el Conservatorio de Música Isaías Orbe, quedó en suspenso hasta el año próximo, a la espera de mayores novedades provenientes de la nueva gestión provincial que asumirá el 10 de diciembre.

Tras movilizarse en numerosas ocasiones, en septiembre último desde el Ejecutivo local acercaron una propuesta para que se construya una sede unificada de ambas en un terreno propiedad de la Dirección General de Cultura y Educación situado en Avellaneda y Ricchieri. La noticia resultó sorpresiva porque cada entidad educativa tenía un predio asignado; en el caso del Conservatorio, en Las Tunitas, y del IPAT, en la calle La Pampa, a metros del barrio Procrear.

La lucha que encabezaron los estudiantes, docentes, gremios y autoridades desnudó una vez las históricas falencias edilicias en los diferentes niveles de educación -producto de una desidia estatal que lleva años-, y logró instalar el tema en la ciudad.

Avances y quietud 

Emiliano Invernizzi, vicepresidente del centro estudiantil, le contó a El Eco de Tandil que en la reunión de UEGD (Unidad Educativa de Gestión Distrital), llevada a cabo el 30 de septiembre, se confirmó la aceptación del terreno con miras a iniciar un diálogo con funcionarios provinciales de la Dirección Provincial de Infraestructura para comenzar a pensar en un proyecto de obra. “Hubo un primer acercamiento, se entregó un informe situacional de matrícula, metros cuadrados que se necesitan y condiciones de las instalaciones. Datos que deberían tener, es un empezar de cero. Después no hubo más novedades”, precisó.

Para el año próximo, con una nueva gestión de gobierno guiando los destinos bonaerenses, esperan volver a desplegar las cartas sobre la mesa y encarar una nueva lucha orientada a conseguir  una partida presupuestaria que les permita materializar el sueño de la sede propia. Las elecciones generales del 27 de octubre y el triunfo opositor en las urnas provinciales y nacionales, instalaron un nuevo escenario que por el momento no ha arrojado demasiada definiciones, pero que les inoculó un poco de esperanza en torno a que existan cambios en las políticas públicas.

“No sabemos dónde estarán las prioridades”, analizó Invernizzi, pero remarcó que el norte está fijado y que la consigna “Por un edificio digno” continuará repitiéndose hasta que el deseo se haga realidad.